Muguruza pasa con susto a la tercera ronda de Roland Garros

  • Derrotó a la estonia Kontaveit por 6-7, 6-4 y 6-2: "Me encuentro bien y he podido ganar, es mi torneo favorito"
Garbiñe Muguruza
Garbiñe Muguruza |Telemadrid

Garbiñe Muguruza, cuarta favorita, accedió a la tercera ronda de Roland Garros, donde defiende el título, tras ceder el primer set frente a la estonia Anett Kontaveit, a quien acabó derrotando por 6-7(4), 6-4 y 6-2 en dos horas y 8 minutos. Fue una victoria trabajada, fruto de la paciencia, de dejar que su oponente, una tenista ascendente de 21 años y 53 del mundo, fuera perdiendo la confianza en su tenis agresivo.

Y la estrategia le dio resultado a Muguruza en su pista fetiche, la central de París, el escenario de su mayor éxito. "Había perdido contra ella hace poco, pero en este torneo me encuentro bien y he podido ganar, es mi torneo favorito", dijo la española, que perdió contra su rival de hoy en el pasado torneo de Sttutgart.

"A ESPERAR A QUE EL PARTIDO CAMBIARA DE SENTIDO"

Muguruza confesó que durante buena parte del partido se vio obligada a resistir las embestidas de Kontaveit y "esperar a que el partido cambiara de sentido". Durante un set y medio fue la estonia quien llevó la voz cantante, acumulando los golpes ganadores y sacando la peor versión de Muguruza en su temporada más irregular, en la que no ha levantado ningún trofeo desde que lo hiciera en París con la Suzanne Lenglen.

La paciencia fue la clave del duelo. Garbiñe no se descompuso ni cuando en el primer set llegó a perder 5-2 y logró remontar hasta el juego de desempate, que finalmente cayó del lado de la estonia. El empuje de Kontaveit prosiguió en el inicio del segundo set, en el que comenzó rompiendo el saque de Muguruza, que se limitó a limitar pérdidas hasta que se le acabó la gasolina a su rival.

ESPERA RIVAL

En el sexto, la española recuperó el saque y la confianza de la estonia fue degradándose. Su juego agresivo, su búsqueda permanente del golpe ganador ya no fue tan eficiente. Mantuvo Muguruza su servicio en el siguiente tras desperdiciar su rival dos bolas de rotura y acabó por cerrar el set en el décimo con servicio de su rival.

La confianza había cambiado de lado. Muguruza empezó a sentirse mejor en la central de París al tiempo que a la estonia el partido le iba viniendo largo. El final fue un monólogo de la española, que se anotó los últimos cuatro juegos para cerrar el partido a la primera oportunidad, cuando Kontaveit envió fuera una bola.

Muguruza se medirá por un puesto en octavos de final contra la kazaka Yulia Putintseva, cabeza de serie 27, que venció a la sueca Johanna Larsson por 6-3, 1-6, 6-3. La española le ha vencido en el único duelo entre ambas, que tuvo lugar en el torneo de Pekín del año pasado.