Tres palestinos muertos en disturbios contra las medidas de seguridad en la Explanada de las Mezquitas

  • 400 heridos en choques con la policía israelí
  • Rechazan los detectores de metales instalados por Israel tras los ataques terrorista en los que murieon 2 policias

La violencia marcó la jornada del viernes, día sagrado para los musulmanes, en Jerusalén Oriental y Cisjordania, donde tres palestinos murieron y 400 resultaron heridos en choques con la policía israelí en protesta por las medidas de control de Israel en el entorno de la Explanada de las Mezquitas.

Los palestinos consideran que el refuerzo de las medidas de seguridad (consistentes básicamente en la colocación de arcos detectores de metales) supone un intento de los israelíes por apropiarse del lugar, el tercero más sagrado del Islam y el más sagrado para el judaísmo, pues alberga el también denominado Monte del Templo, a cuyos pies se encuentra el Muro de las Lamentaciones.

El ambiente comenzó a caldearse cuando miles de musulmanes se acercaron a las inmediaciones del recinto, donde se negaron a atravesar los detectores de metales instalados por Israel el día 16, tras el ataque cometido dos días antes por tres árabe-israelíes, que asesinaron a dos policías y luego fueron abatidos por las fuerzas de seguridad de Israel.

También se produjeron forcejeos e incidentes en diversos barrios de Jerusalén Este y Cisjordania, donde cientos de palestinos lanzaron piedras y cócteles molotov contra las fuerzas de seguridad israelíes, que cargaron contra los manifestantes.

En las revueltas fallecieron tres palestinos: Mohamad Sharaf, un joven de 18 años del barro jerosolimitano de Ras Al Amoud, que pereció tras recibir un disparo en el cuello, Mohamad Hasan Abu Ganem, de 19 años, muerto en enfrentamientos en el barrio de A Tur y Mohamad Lafi, de 17 años y herido en el barrio de Abu Dis, en el este del muro de separación que Israel construyó en Cisjordania.

El servicio de emergencias de la Media Luna Roja confirmó 391 heridos en los disturbios, muchos de ellos por inhalación de gas, pero también decenas por quemaduras y heridas de munición real y de balas recauchutadas, confirmó a Efe un portavoz.

Efe presenció cerca de las murallas cargas policiales y detenciones de los fieles que, finalizado el rezo en las calles, lanzaron botellas de agua a los agentes que cortaban el acceso a la ciudadela amurallada, donde solo se permitía el paso por los puntos más cercanos a la explanada a los hombres mayores de cincuenta años y las mujeres.

Los disturbios se repitieron en distintos barrios del este de Jerusalén (territorio ocupado) y en varios puntos de Cisjordania, incluidas las localidades de Qalandia, Hebrón, Belén y Tulkarem.