Okinawa recuerda una de las batallas más cruentas de la II Guerra Mundial

  • El primer ministro nipón, Shinzo Abe, ha realizado la ofrenda floral durante la ceremonia conmemorativa del 72 aniversario del fin de la Batalla de Okinawa
Ofrenda floral en Okinawa en el aniversario de una de las batallas más cruentas de la II Guerra Mundial
Ofrenda floral en Okinawa en el aniversario de una de las batallas más cruentas de la II Guerra Mundial |Telemadrid

El archipiélago japonés de Okinawa conmemoró este viernes el 72 aniversario de la feroz batalla que albergó durante la Segunda Guerra Mundial, una de las más cruentas de la contienda con más de 200.000 víctimas, la mitad civiles.

Tanto el primer ministro nipón, Shinzo Abe, como el gobernador de Okinawa, Takeshi Onaga, tomaron parte en la ceremonia conmemorativa que se ha celebrado en el Parque de la Paz de Itoman, localidad en el sur de la isla principal de Okinawa y escenario del final de la batalla.

La Batalla de Okinawa supuso la única invasión terrestre de Estados Unidos en Japón durante la II Guerra Mundial, y se produjo pocos meses antes de la rendición total del país asiático a los pocos días de lanzarse las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki.

El sangriento enfrentamiento duró tres meses y costó la vida de uno de cada cuatro okinawenses, unos 94.000 en total. Durante la ceremonia, Onaga volvió a subrayar la excesiva presencia militar estadounidense que soporta el archipiélago desde el final de la guerra e instó a compartir esa carga entre todas las regiones japonesas.

También dijo que no puede "tolerar" las obras que se realizan para trasladar la polémica base estadounidense de Futenma a una zona del norte de la isla principal, algo que la población local ha criticado duramente con continuas protestas.

Por su parte, el primer ministro Abe reconoció la abrumadora presencia estadounidense y se comprometió a aligerarla, aunque en ningún momento apuntó a la posibilidad de cancelar el traslado de Futenma.

Las autoridades okinawenses suelen aprovechar el aniversario para subrayar la pesada carga que soporta aún este pequeño archipiélago, que acoge en torno al 75 por ciento de las instalaciones militares estadounidenses que hay en Japón.

Las bases militares, que ocupan una quinta parte de la superficie de la isla principal, fueron construidas sobre suelo expropiado durante el periodo de ocupación estadounidense que duró hasta 1972, dos décadas más que en el resto del país asiático.