El abogado de Ignacio González recurrirá su prisión preventiva por ser "una medida extrema"

  • Instituciones Penitenciarias asigna a los hermanos Ignacio y Pablo González la misma celda en Soto del Real

Esteban Mestre, abogado del expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González en el caso Lezo, ha dicho que recurrirá su ingreso en prisión preventiva, que ha tachado de "medida extrema", porque no hay sentencia de condena ni presunción de culpabilidad.

Mestre ha argumentado que en prisión preventiva "no se vive en condiciones de tranquilidad para preparar la defensa" y que, además, "afecta al ejercicio de los derechos fundamentales".

"Sólo cuando hay medidas excepcionalísimas se puede tomar esta medida", ha opinado, para después explicar que los únicos motivos por los cuales "se puede mantener a una persona que todavía es inocente en prisión" son el riesgo de fuga, de reiteración delictiva y destrucción de pruebas. "Creo que en este caso no concurren. Por eso voy a recurrir", ha remachado.

Por otro lado, Mestre ha explicado que González ha negado "el contenido de los interrogatorios" que se le hicieron en el juzgado de instrucción, así como las acusaciones delictivas contenidas en el auto de prisión, para el que "da unas argumentaciones alternativas sobre el sentido de las cosas que le preguntan".

El abogado ha dicho que el expresidente "tiene ganas de defenderse porque tiene argumentos", pero antes tendrá que recopilar información para "buscar el contraste". "Todavía estamos empezando la investigación", ha señalado.

Preguntado sobre la presencia de un micrófono, colocado por los investigadores, en el despacho profesional de González, Mestre ha admitido que "es una medida legal" recogida en la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim). Eso sí, ha dicho que desconoce "la fundamentación en virtud de la cual se adoptó ese criterio". El letrado Esteban Mestre ha afirmado este miércoles que su cliente está "tranquilo" y haciéndose "con la vida en prisión".

Tras señalar que la familia del expresidente está "expectante", ha indicado que González está "colaborando" con su defensa y "haciéndose con la vida en prisión", donde comparte celda con su hermano Pablo.

"Ayer le vi quince minutos. Está tranquilo. Estamos trabajando en la puesta en libertad. Sobre el fondo de las acusaciones, todavía no hemos podido hablar. Las cosas tienen un trámite. Hoy presentamos el recurso por la libertad", ha dicho. "No hacemos grandes valoraciones. Estamos trabajando en lo nuestro", ha aseverado.

Instituciones Penitenciarias ha asignado a los hermanos Ignacio y Pablo González la misma celda en la prisión Madrid V de Soto del Real, han confirmado a Europa Press fuentes penitenciarias. Ambos hermanos se encuentran en el módulo adaptado para internos de mayor edad, sin medidas antisuicidio y sin comunicaciones intervenidas.

Los técnicos de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias han tenido en cuenta la coincidencia en la misma celda de los hermanos González, cabecillas supuestamente de la trama corrupta ligada al Canal de Isabel II y otras empresas públicas, para evitar que se aplique el protocolo antisuicidios.

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco acordó el viernes al filo de la medianoche la prisión para ambos, en el caso de Ignacio incondicional comunicada y en el de Pablo eludible bajo el pago de una fianza de cuatro millones de euros.

LA JORNADA EN PRISION

Soto del Real es la cárcel habitual de ingreso para los investigados por corrupción en la Audiencia Nacional, aunque transcurrido un tiempo pueden pedir sus traslados. Aquí ingresaron, por ejemplo, los principales 'cabecillas' del 'caso G~rtel' cuando se desencadenó esta operación anticorrupción, así como Miguel Blesa y Gerardo Díaz Ferrán, entre otros.

El día para un preso en Soto del Real empieza en torno a las 8.00 horas. Tras el aseo y la limpieza de la celda pasan a desayunar en torno a las 8.30. Luego tienen un tiempo de patio o para actividades hasta la comida que, generalmente, se sirve a las 13.30 horas.

Después de comer suben a sus celdas hasta las 16.30 aproximadamente y los internos vuelven a tener tiempo de patio o actividades hasta la hora de la cena, que se sirve en torno a las 20.00 horas. Según las fuentes consultadas por Europa Press, los presos están de nuevo en sus celdas para dormir a las 21.30 horas aproximadamente.

Los internos disponen de cinco llamadas de cinco minutos a la semana, aunque previamente tienen que comunicar los diez números de teléfono de las personas con las que quieren hablar. Una vez en prisión, los presos pueden desempeñar distintas funciones o trabajos denominados destinos.

El penal madrileño suma 14 módulos ordinarios, además del módulo de ingresos, el módulo de aislamiento y el edificio de enfermería. Cada módulo cuenta con 72 celdas, un patio (sólo las cárceles antiguas se mantienen un solo patio común para todos los módulos), el comedor, una sala de estar y un pequeño gimnasio.