El PP pide paralizar las obras que dejan la avenida de Oporto con un solo sentido

  • Martínez-Almeida afirma que provocará más atascos y contaminación
  • Pierde la subida a la calle General Ricardos para incorporar un carril bici

El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida ha pedido hoy que el Gobierno de Manuela Carmena paralice las obras que ya ha comenzado en la avenida de Oporto, que pasa a ser de un solo sentido -pierde el de subida- para incorporar un carril bici. El concejal ha acudido hoy al distrito de Carabanchel, donde ha atendido a las quejas de vecinos y comerciantes por unos cambios que se tomaron sin consultarles, sin aviso y que rechazan.

Que la avenida de Oporto pierda un sentido -el de subida a la calle General Ricardos- provocará más atascos y contaminación, ha asegurado ante los medios el concejal del PP.

Martínez-Almeida ha denunciado que con el cambio una estrecha calle paralela -La Vía- va a tener que "soportar una intensidad de tráfico de 10.000 vehículos al día", teniendo tres colegios, una guardería, escuela oficial de idiomas y hasta seis líneas de autobuses.

Junto al PP, también rechazan este plan PSOE y Ciudadanos; los tres partidos pidieron ayer en el pleno del distrito de Carabanchel que el Ejecutivo local paralice las obras, un mandato que Martínez-Almeida exige que asuma la alcaldesa Manuela Carmena.

"La participación ciudadana consiste en escuchar aquello que no te gusta y asumir el mandato del pleno", ha asegurado el edil, que cree que con esta actuación el Ejecutivo local de Ahora Madrid vuelve a acometer una actuación "individual" con la que muestra su "desprecio" por los ciudadanos.

El 'popular' ha defendido que actuaciones locales en ejes principales de los distritos, como la acometida en Carabanchel, tienen efecto global en la movilidad de la ciudad, por lo que pide un estudio sobre las afecciones que los distintos planes municipales tienen en el conjunto de la capital. "No se puede hacer operaciones sin un marco global (...) no vayamos precipitadamente de forma improvisada y por favor no experimentemos con los ciudadanos", ha exclamado.

En su visita por Carabanchel, el portavoz del PP ha estado acompañado tanto por vecinos como por comerciantes, muy críticos con una actuación municipal que les pilló por sorpresa.

Cuestionan que en un barrio mayor sea necesario un carril bici -no se cuentan ni tres bicicletas por hora, aseguran- y piden en cambio que se pavimenten aceras llenas de baches."Era una calle que funcionaba general y ahora, horrible", ha afirmado una de las comerciantes.

Otra ha censurado que por las obras se verán perjudicados los resultados de su negocio: "vivimos de lo que compra la gente del barrio, si no pueden acceder a nosotros perdemos todos y el comercio pequeño se va", ha apostillado.