La Comunidad de Madrid aprueba el proyecto de la nueva Ley de Universidades

La presidenta regional Cristina Cifuentes ha anunciado hoy la aprobación del proyecto de Ley del Espacio Madrileño de Educación Superior (LEMES), que ha calificado como "una ley necesaria para mejorar la competitividad de las universidades madrileñas". La aprobación por el Consejo de Gobierno se produce tras "más de 60 reuniones con los rectores de universidades públicas y privadas", con los sindicatos, representantes estudiantiles y partidos políticos entre otras entidades, para incorporar aportaciones y buscar "el mayor consenso" posible, ha dicho en rueda de prensa.

El proyecto "viene con el visto bueno de los rectores de todas las universidades públicas", según Cifuentes para quien "Madrid necesita una ley de universidades como tienen otras CCAA. Es una ley buena, así lo creen los rectores y queremos que el resto de los partidos se sumen", ha dicho. A juicio de la presidenta, la Lemes va a "reforzar el sistema educativo público y contribuir a modernizar la educación superior, además de impulsar la competitividad tanto nacional como internacional de las universidades".

Para ello, contará con "un instrumento fundamental: una financiación adecuada", con dos vías: por un lado básica, y por otro, variable, que se dará en base a unos parámetros cuantificables. Aún no se sabe cuál será el porcentaje de la parte variable, pero Cifuentes ha garantizado que el importe fijo "cubrirá los gastos básicos, lo que necesitarán las universidades para funcionar", según criterios objetivos como su tamaño, número de estudiantes y profesores, titulaciones impartidas.

En la subvención variable, que ya aplican otras CCAA como Cataluña, se va a primar "cuestiones como mejoras en la docencia, investigación y transferencia del conocimiento", añadió Cifuentes para quien "una financiación mayor es un estímulo para la búsqueda de la excelencia también en el sistema universitario". Entre los criterios para cuantificar la parte variable figuran el número de publicaciones y su impacto; la tasa de éxito de las titulaciones; el uso de nuevas metodologías docentes, la capacidad para captar fondos para investigación; planes de estudios bilingües, atracción de estudiantes extranjeros, entre otros.

La base de esta financiación variable "serán contratos-programa establecidos de mutuo acuerdo entre las universidades públicas y la Comunidad", según el Gobierno regional. El proyecto "se ha modificado sustancialmente hasta la propuesta actual, que cuenta con el respaldo de los rectores, algo que era para nosotros era esencial para iniciar la tramitación", ha añadido.

Además de la financiación estable y plurianual, la Lemes concede "un protagonismo mayor a profesores y estudiantes". En el caso de los estudiantes, se fomentará su participación tanto en la gestión universitaria como en la evaluación del profesorado, que se tendrá en cuenta en los indicadores de calidad vinculados a la parte de la financiación variable.

Se favorecerá la movilidad docente con convocatorias de plazas "más competitivas para retener el talento y atraer nuevos investigadores"; se fomentará la cooperación interuniversitaria y el papel de los consejos sociales como órgano de participación de la sociedad. Respecto a las universidades privadas, Cifuentes ha defendido su coexistencia con las públicas, pero deben tener unas "mínimas garantías", y se elevarán los requisitos para la apertura de nuevas privadas ya que "no se pueden concebir como negocio".

La Lemes marca "un antes y un después en la enseñanza superior, al aportar mejor financiación, mayor participación de estudiantes y mayor protagonismo de los profesores". Cifuentes ha hecho "un llamamiento a todos los grupos; es una ley que ha sido muy trabajada, apoyada como buen punto de partida por todos los rectores", tras un acuerdo con "muchas partes" diferentes que "no ha sido fácil", y le "gustaría que se aprobara con el mayor consenso posible" en la Asamblea.

La presidenta se mostró convencida de que el portavoz socialista Ángel Gabilondo, "va a ver el texto con agrado", y espera que las aportaciones de los grupos "sean para mejorar el texto".

El proyecto consensuado parte de la base de la financiación universitaria de 2011, la mayor de los últimos años, como suelo mínimo.