Un nuevo bosque de 4.800 árboles en Villaverde actuará como sumidero de CO2

  • Las obras estarán finalizadas en el mes de noviembre

El Area de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamuiento de Madrid ha iniciado la reactivación vegetal de una parcela de 10,8 hectáreas junto al río Manzanares, en el distrito de Villaverde, para convertirla en un nuevo sumidero de captación de dióxido de carbono (CO2) gracias a la plantación de 4.800 árboles de rápido crecimiento y la instalación de una red de riego con agua regenerada. La obra estará finalizada en el mes de noviembre.

De esta forma, el Consistorio pretende dar cumplimiento al Protocolo de Kioto, que será sustituido por el de París en 2020, transformando en zonas forestales lo que antes eran terrenos baldíos y reducir así la presencia de dióxido de carbono, uno de los gases contaminantes de efecto invernadero, en el aire de la ciudad.

El presupuesto de adjudicación ha sido de 726.953,71 euros, IVA incluido, y pertenece a las Inversiones Financieramente Sostenibles (IFS) de 2017. La parcela se encontraba actualmente sin uso específico y había sido utilizada como vertedero de residuos con depósitos de áridos y escombros de diferentes tamaños y origen repartidos por toda la superficie.

El terreno se sitúa junto a la margen derecha del Manzanares por lo que se plantarán árboles de ribera con el fin de reconstruir el ecosistema propio de la zona, actualmente perdido. El terreno linda al norte y este con el río, al sur con la autovía M-45 y al oeste con la avenida de los Rosales. Además, se une a otra parcela contigua (Parcela A) de 13,5 hectáreas que se reforestó el invierno pasado con 2.322 árboles.

La vegetación existente había crecido espontáneamente y se encuentra seca o en mal estado y en el terreno se aprecia alguna senda utilizada por senderistas o ciclistas. Los trabajos han comenzado con el desbroce, limpieza y retirada de residuos por medios mecánicos de toda la superficie de la parcela objeto del presente proyecto. Todos los restos serán tratados y transportados a vertederos autorizados.

A continuación se realizarán los movimientos de tierra necesarios para dejar el terreno allanado con suelos procedentes de la propia obra, incluyendo transporte interior de los materiales, nivelación y compactación. Por último se instalará una red de riego con agua regenerada y se procederá a la plantación de árboles.