40.000 evacuados y cierre del aeropuerto de Bali ante la posible erupción del Agung

  • Elevan 'rojo' el nivel de alerta a causa de la emisión desde el sábado de una gran columna de ceniza que podría desembocar en una gran erupción volcánica
  • Entre 90.000 y 100.000 personas residen en un radio de hasta diez kilómetros desde el monte Agung

Alrededor de 40.000 personas han sido evacuadas de los alrededores del monte Agung, situado en la isla indonesia de Bali, ante la amenaza de erupción del volcán, si bien las autoridades han recalcado que decenas de miles aún han de abandonar la zona.

"Pedimos a la gente en la zona de peligro que evacue inmediatamente porque existe el potencial de una erupción mayor", ha dicho Sutopo, portavoz de la Agencia de Mitigación de Desastres de Indonesia (BNPB). Así, ha detallado que entre 90.000 y 100.000 personas residen en un radio de hasta diez kilómetros desde el monte Agung, que ha sido declarado como una zona de exclusión por las autoridades.

"No todos los residentes han evacuado. Hay algunos (que no lo han hecho) debido a que sus animales no han sido evacuados. Hay algunos que piensan que están a salvo", ha subrayado, agregando que las autoridades intentan persuadirles para que lo hagan y adelantando que podrían tener que recurrir a la fuerza.

ERUPCIÓN INMINENTE

La PNPB ha avisadode una erupción "inminente" de más intensidad. "La erupción y los temblores han ocurrido de forma continua. Además, la lava sigue llenando el cráter y cuando rebose comenzará a deslizarse por la ladera. Hay posibilidades de una erupción mayor", indicó Nugroho en rueda de prensa.

Otro problema son los lahares, como se llama a los flujos de sedimentos piroclásticos y agua que se movilizan desde las laderas del volcán y cuya situación se ve agravada por la temporada de lluvias en Indonesia.

Las autoridades de Indonesia elevaron el domingo a 'rojo' el nivel de alerta a causa de la emisión desde el sábado de una gran columna de ceniza desde el monte Agung, lo que ha llevado al cierre del Aeropuerto Internacional de Lombok.

El Centro de Mitigación de Peligros Vulcanológicos y Geológicos (PVMBG), dependiente del Ministerio de Energía y Recursos Minerales, indicó que la columna de ceniza asciende a más de 6.140 metros de altura, según la agencia estatal indonesia de noticias, Antara.

El PVMG manifestó que "se pueden escuchar explosiones débiles a doce kilómetros de distancia" y que "las llamas son visibles durante la noche", agregando que "esto indica que una potencial erupción podría tener lugar en cualquier momento". "Ante la posibilidad de un riesgo inminente de desastre, el PVMBG eleva el nivel de alerta en el monte Agung", dijo, pidiendo a los residentes en un radio de hasta diez kilómetros que evacuen la zona, según la agencia británica de noticias Reuters.

VUELOS CANCELADOS

El organismo detalló que las cenizas no afectan al aeropuerto, sino en dirección norte y suroeste respecto al monte Agung. Pese a ello, un total de 26 aerolíneas habían cancelado desde el sábado sus operaciones desde Bali. El Ministerio de Transporte emitió poco después del informe del PVMBG una orden para el cierre del citado aeropuerto, y la estatal Angkasa Pura I resaltó que se debe al "impacto directo de la ceniza volcánica del monte Agung", tal y como recogió el diario local 'The Jakarta Globe'.

El volcán balinés Agung expulsó el 21 de noviembre por la tarde una nube de vapor negro de 700 metros de altura pero las autoridades mantienen el nivel de alerta de erupción 3 (el máximo es el 4), indicaron fuentes oficiales. El director de información de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNBP, en indonesio), Sutopo Purwo Nugroho, explicó en un comunicado que la erupción fue de tipo freático y señaló que la zona de seguridad permanece en un radio de entre 6 y 7,5 kilómetros alrededor del cráter.

El cierre del aeropuerto comenzó por la mañana, durará 24 horas, con revisiones periódicas de 6 horas, y afectó a 445 vuelos y decenas de miles de pasajeros, según la PNPB.

Las autoridades han recomendado el uso de mascarillas por la nube de ceniza de la última erupción, ocurrida el fin de semana, que alcanzó los 4.000 metros de altura, y se mueve en la actualidad en dirección estenoreste hacia el mar y la isla de Lombok, aunque podría cambiar por el viento.