Así es Sapporo, la primera gran ciudad japonesa en reconocer uniones civiles LGTB

Sapporo, primera gran ciudad nipona en reconocer las uniones homosexuales
Sapporo |Telemadrid

Sapporo se convirtió hace unas semanas en la primera gran ciudad de Japón en reconocer las uniones civiles entre lesbianas, gais, transexuales y bisexuales (LGTB), después de que este paso se haya dado ya en dos barrios de Tokio y en varias localidades pequeñas.

Las autoridades municipales de la quinta mayor ciudad nipona, de unos 2,5 millones de habitantes, comenzaron hoy a expedir certificados que, aunque no son legalmente vinculantes, permitirán a las parejas LGTB ejercer ciertos derechos y acceder a determinados servicios.

Al firmar un "voto de asociación", la pareja obtiene un recibo de la ciudad que, aunque no confiere derechos y obligaciones legales, les permite convertirse en beneficiarios del seguro de vida de su compañero y utilizar descuentos familiares para ciertos servicios, en un país que no reconoce legalmente el matrimonio homosexual.

La iniciativa upone un paso más hacia la legalización en la práctica de este tipo de enlaces en Japón, y llega después de que los distritos tokiota de Shibuya y Setagaya se convirtieran en 2015 en las primeras en poner en marcha este sistema.

Las localidades de Iga (centro), Takarazuka (oeste) y Naha (sur) empezaron a reconocer las parejas del mismo sexo en 2016, mientras que grandes compañías del país asiático han comenzado a aplicar recientemente normativas laborales que equiparan los derechos de sus empleados gais con los de sus trabajadores heterosexuales.

Además, este reconocimiento se produce después del histórico fallo de la Corte Suprema taiwanesa del 28 de mayo, que declaró inconstitucional las restricciones legales a las uniones entre personas del mismo sexo y fijó un plazo de dos años para enmendarlas, lo que convertirá a Taiwán en el primer país de Asia con bodas homosexuales.

La Constitución japonesa define el matrimonio como "unión basada sólo en el consentimiento mutuo de personas de diferente sexo", mientras que la legislación civil nacional no reconoce derecho alguno para las parejas homosexuales.