Dos taxistas denunciados en Sevilla por trucar el contador para elevar el precio

  • En Madrid, el sector del taxi asegura que los numerosos controles que pasan los vehículos impiden el fraude con la alteración del taxímetro

Taxistas sevillanos manipulaban los taxímetros con un complejo sistema electrónico incrustado en la palanca de cambios que aceleraba el contador para elevar el precio final. Dos taxistas sevillanos han sido detenidos por utilizarlo.

Para quitar recelos y desconfianza de los usuarios, hoy nos hemos preguntado si este fraude sería posible en Madrid. La respuesta es un rotundo 'no'. El sector del taxi recuerda que los numerosos controles que pasan los vehículos en Madrid impiden la alteración del taxímetro

La Policía Local de Sevilla, y más concretamente agentes adscritos al Grupo Especial de Transporte e Intrusismo (SETI) de la Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, han informado de la detección del presunto fraude de un grupo reducido de taxistas de la ciudad consistente en la supuesta manipulación de los taxímetros al descubrir un sistema de alteración del precio final de cada carrera. De momento, han sido denunciados dos taxistas, aunque la investigación sigue abierta.

SOFISTICADO Y SUTIL SISTEMA DE FRAUDE

Según ha detallado el Ayuntamiento de Sevilla en un comunicado, este sistema consiste en un "sofisticado y sutil" aparato electrónico que aumentaba la velocidad del taxímetro al accionarse un dispositivo mecánico que, a su vez, enviaba distintos impulsos electrónicos con capacidad para modificar y alterar el display del taxímetro del frontal del vehículo. De hecho, el taxímetro se alteraba de manera exponencial según el número de impulsos provocados por la mano del propio taxista.

La actuación de la Policía Local ha detectado que este grupo reducido de taxistas situaba un medio mecánico, tipo interruptor, en las inmediaciones de la palanca de cambios. Se encontraba debajo del guardapolvos para que el cliente no pudiera verlo, accionándose en el momento de situar la mano sobre la palanca de cambio, ha añadido el comunicado del Consistorio.

Arrancado el taxi, y con la mano en la palanca de cambio, podía activar el botón. Este mandaba un impulso a una tarjeta electrónica que actuaba a modo de "tapa de potencia" que lanzaba los impulsos electrónicos a través de un complejo sistema de cableado escondido entre la palanca de cambios y el salpicadero del taxi. Estos impulsos electrónicos tenían la capacidad de alterar el precio final del trayecto, y así se realizaba el cobro fraudulento al cliente.

Estos hechos, de los que la propia Policía Local ya venía investigando desde meses atrás, han desembocado ya en la apertura de los correspondientes expedientes de denuncia, así como la instrucción de las correspondientes diligencias a la autoridad judicial.

En concreto, dos taxistas han sido puestos a disposición judicial, aunque no se descartan nuevas actuaciones, al estar instruyéndose diligencias por un supuesto delito por alteración o manipulación de aparatos automáticos para alterar el precio de las cosas, sin descartar estafa u otras figuras.

EL PROCESO

Localizado un primer taxi y corroborada la existencia del artilugio, la Policía Local hizo una comprobación in situ del sistema. Luego se llevó el vehículo a una estación de ITV para verificar el resultado. Allí, y con el taxi en un banco de pruebas, se hizo una especial para certificar la posible manipulación, y efectivamente se corroboró la posibilidad de manipular los valores de kilómetros y horario en el taxímetro en unos valores de 1.400 por ciento y 3.200 por ciento, respectivamente, al accionarse.

Fruto de las pesquisas de la Policía, se descubrió también que el sistema se basaba en un circuito electrónico de pequeñas proporciones para facilitar su ocultación y con capacidad para generar impulsos que alteraban las frecuencias de taxímetros. Asimismo, tenía capacidad para ajustar la frecuencia a través de un trimmer con precisión y sin posibilidad de errar. El precio de la tarjeta electrónica oscilaba entre 20 y 30 euros. Se han localizado algunos establecimientos y webs donde se vendían.