El influyente de Instagram, un nuevo perfil comercial que se debe regularizar

El influyente de Instagram, un nuevo perfil comercial que se debe regularizar
Instagram |Telemadrid

El auge de la red social Instagram, con más de mil millones de perfiles, ha alumbrado la figura de los usuarios influyentes (influencer) que son captados por las marcas comerciales y que hay que regularizar y profesionalizar, como pasó en su día con el gestor de empresas o "community manager".

Así se ha puesto de manifiesto en la séptima edición del congreso internacional sobre redes sociales Comunica2, que se celebra en el campus de la Universidad Politécnica de Valencia en Gandia y que hoy ha abordado el fenómeno de Instagram, las nuevas narrativas, los troles y el buen uso del idioma, entre otros temas.

El editor, diseñador gráfico y coadministrador del perfil y asociación cultural @DescobreixCatalunya, Manel Subirats, el arquitecto Emilio Chulià y Marta Celeda y Eva Anta Guillem, de la empresa MarvelCrowd, encargada de asesorar a personas influyentes en Instagram, han coincidido en la necesidad de dar una cobertura legal y profesionalizar la figura del "influencer", como pasó en su día con el gestor de empresas o de comunidades ("community manager").

Las personas con un mayor número de seguidores cuentan incluso con un equipo asesor, representantes, contables o técnicos de televisión, por lo que generan más puestos de trabajo y son una figura que hay que regularizar, como ocurrió con el "community manager", ha expuesto Celeda.

También se han abordado las "nuevas narrativas transmedia" que generan las redes y los medios digitales, una nueva forma de contar historias donde el usuario cobra protagonismo, participa y puede tener una experiencia única con los contenidos, y que abre nuevas posibilidades para los medios de comunicación y la difusión de todo tipo de contenidos.

Así lo han puesto de manifiesto el director del Laboratorio de Innovación Audiovisual (LAB) de RTVE, César Peña, el arquitecto Miquel del Pozo y Pilar Delgado, de Casa Batlló.

Las redes permiten a los usuarios elegir "cómo quieren que sea contada la historia"; lo que ha cambiado no es la narrativa sino el espacio en torno al que se realiza el relato, ha destacado Del Pozo, que el primer domingo de cada mes escribe un capítulo en su cuenta de Twitter, con la etiqueta #MA140, sobre su mirada personal hacia el arte, con una gran audiencia.

Para César Peña, miembro del LAB de RTVE que ofrece contenido interactivo, documentales web y servicio a la carta, "por primera vez no es el formato el que define cómo tiene que contarse la historia" y el usuario puede participar de la misma.

"Estas vivencias, además, permiten al usuario sentir y empatizar con los protagonistas de la grabación", ha señalado Peña.

Pilar Delgado, autora de "El dado del Arte", considera además que se está pasando de la explosión del "microformato" al "boom" del "microrrelato visual" a través de herramientas como el 'Stories' de Instagram o el Snapchat, con vídeos efímeros de diez segundos que "seguramente" será hacia donde se dirijan el resto de redes sociales.

El congreso también ha abordado el uso del español en las redes, de la mano de Álex Herrero, miembro de la Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) que colabora con la organización de este encuentro, que se ha referido a la responsabilidad de los usuarios cuando publican contenidos y la elección del registro adecuado.

"Hoy en día todos somos microperiodistas que abordamos nuestra realidad a través de las redes", ha indicado Herrero, quien defiende además la necesidad de cuidar el lenguaje: "Nuestras palabras son nuestra imagen", ha indicado, al tiempo que ha reivindicado internet como una forma de promover el buen uso de la ortografía.