Errores que cometemos y consejos para evitar robos en viviendas
REDACCIÓN
El caso del robo en casa del futbolista Álvaro Morata ha puesto en duda la seguridad de nuestras casas. ¿Sabemos protegernos de los ladrones? El programa Madrid Directo, de Telemadrid, ha contactado con la empresa de seguridad Fichet para que nos den algunos consejos. ¿Qué errores cometemos? ¿Dónde debemos guardar los objetos de valor?
Los principales errores que cometemos a la hora de guardar el dinero y objetos de valor en la vivienda
Muchas personas cometen el mismo error: esconder el dinero o las joyas debajo del sofá, del colchón o de los cojines. Son los primeros lugares que revisan los ladrones: mobiliario, cajones e incluso libros.
Esconder dinero en tarros de la cocina también es otro error bastante habitual, o comprar uno de esos libros huecos donde meter el dinero. Normalmente son objetos que los ladrones revisan.
Lo primero que registran los ladrones son muebles, cajones, altillos y tarros de la cocina
Tampoco es buena idea guardar joyas en los altillos de los armarios, aunque las guardemos en bolsas de plástico normales, en un intento de 'despistar' a los ladrones.
Dónde guardar el dinero y los objetos de valor en casa
Lo mejor, según Juan Crespillo, director de la empresa Fichet, es tener no una, sino dos cajas fuertes. La primera caja fuerte puede ser pequeña y la podemos tener en el dormitorio. Se trataría de una caja pequeña, que podemos usar para objetos de valor que usemos en nuestro día a día. esta caja puede costar entre 200 y 300 euros.
La mejor protección contra los ladrones son las cajas fuertes
La segunda caja fuerte sería más grande, de unos 100 kilos de peso, una caja anti robos de categoría 1, ignífuga, anti radial y anti soplete. Una caja perfecta para guardar las cosas de más valor, ya que es prácticamente indestructible. Puede costar entre 1000 y 12.000 euros.
Cómo evitar que los ladrones entren a la vivienda
Los ladrones generalmente entran por la puerta, así que nuestro objetivo debería ser ponérselo difícil. ¿Cómo? Con una puerta con un grosor mayor, acorazada, de pestillos de ganchos (tres cerraduras) y a ser posible, una llaves especial, como puede ser una llave tridimensional.
Una buena puerta acorazada puede costar cerca de 2.000 euros
La puerta debería ser resistente al fuego. Con todas estas características, puede costar cerca de 2.000 euros, 3.500 euros si además es una puerta anti balas.
