Mi cámara y yo: La plaza de mi pueblo

No hay pueblo sin plaza, y allí se establece la convivencia entre ciudadanos y visitantes. Hemos estado en Chinchón, Brunete, Navalcarnero y Madarcos, maravillosos enclaves en los que se pueden encontrar restaurantes y comercios legendarios y escenarios perfectos para películas, series y bodas... e incluso pasadizos secretos bajos sus suelos.