Tras una fotografía publicada por el futbolista Sergio Ramos en su cuenta de Instagram, con un montaje en el que se borran todos los tatuajes de su espalda, muchos quedaron perplejos al no saber si realmente había borrado todos los tatuajes o era cuestión de Photoshop.
Cada vez hay más gente que, cansada de ver siempre lo mismo y de los dibujos que lleva en su piel, acude a clínicas y estudios especializados en láser para eliminar los tatuajes que un día decidieron hacerse.
El nombre de una expareja o no mostrar tatuajes en el trabajo son los principales motivos que llevan a una persona a eliminar lo que formaba parte de su cuerpo.
El proceso se realiza con una máquina de láser que va destruyendo las partículas de tinta, en partículas más pequeñas, el sistema linfático se encarga después de eliminarlas por completo.
Aunque los tatuajes ya no son para toda la vida y la gente le va perdiendo el miedo a la idea de que no se borran del todo, quitarlos cuesta tiempo, dinero y alguna que otra quemadura.
