La madrugada del 12 de febrero de 2005 Madrid perdió uno de los elementos más reconocibles de su skyline. La Torre Windsor sufrió un incendio de grandes dimensiones, que provocó su desmontaje controlado durante los meses posteriores.
Construido en 1979 en pleno centro financiero de Azca, el edificio Windsor tenía 106 metros de altura y era uno de los más altos de la capital hasta la construcción de las Cuatro Torres de la Castellana. Un incendio desatado en la planta 21 del inmueble se propagó rápidamente a las plantas superiores y el edificio acabó sufriendo importantes daños estructurales, aunque no hubo que lamentar pérdidas personales ni heridos.
La historia del incendio del Windsor, que acogía la sede de la consultora Deloitte, siempre estará marcada por las incógnitas: no se llegó a determinar si el fuego se inició de manera fortuita o provocada, y durante años circularon imágenes de supuestas sombras de personas que se movían en el interior de la torre con el incendio activo.