Era lo esperado en la novena Conferencia de Presidentes mantenida por videoconferencia por Pedro Sánchez. El malestar de algunas comunidades autónomas sobre los criterios mantenidos para pasar de una fase a otra en el plan de desescalada era evidente. Este domingo Valencia y Andalucía han levantado la voz y le han espetado al presidente del Gobierno su malestar, señalando tratos de favor por parte del Gobierno de unas regiones sobre otros.
Así lo hizo, el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, quien trasladó su queja al jefe del Ejecutivo,, por lo que considera un “trato diferente” de su región respecto a otras comunidades autónomas .
Durante su intervención, Moreno trasladó que es “difícil de entender” que distritos sanitarios como el de la Costa del Sol en Málaga, con 1.6 casos PCR por 100.000 habitantes, no pueda pasar a la fase 1 cuando distritos sanitarios con incidencias mucho más elevadas –sin citar ninguno en concreto- sí lo han hecho.
Moreno realizó esta queja a Sánchez, según fuentes cercanas al presidente de la Junta, para después advertir al presidente del Gobierno de que está causando un “daño reputacional” innecesario a marcas como la Costa del Sol o Costa Tropical de Granada por esta decisión.
Según dichas fuentes, Moreno recordó que la propuesta de Andalucía a Sanidad era la de mantener en fase 0 a tres distritos sanitarios –de Málaga y Granada- en base a la “prudencia” en la que se ampara el Ejecutivo para justificar el rechazo a la evolución a la fase 1.
Por ello, el presidente andaluz solicitó a Sánchez le traslade los motivos de que Málaga y Granda sigan en la fase 0 y, en segundo lugar, se revise la decisión y se aplique a Andalucía el mismo criterio que a otras comunidades autónomas.
Por otra parte, siempre según fuentes de la Junta, el presidente andaluz mostró la “discrepancia” de Andalucía con el criterio utilizado para repartir los 10.000 millones de euros adicionales para gasto sanitario, al entender que el Ministerio de Hacienda ha modificado de manera unilateral y no justificada el criterio acordado.
Valencia afea a Sánchez la cogobernanza
Por su parte,el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, mantuvo este domingo una actitud “razonablemente” crítica por la forma con la que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha impulsado el plan de desescalada y afeó al presidente del Gobierno que la cogobernanza con la Comunidad Valencia no ha funcionado.
Puig recordó que desde el principio es un firme defensor de la Conferencia de Presidentes como un espacio de corresponsabilidad pero que ello no excluye un espacio de bilateralidad, lo que le llevó a agradecer Sánchez y al conjunto de los presidentes la voluntad de actuar desde la cogobernanza que ha impulsado el Gobierno para la desescalada, según indicaron fuentes del Gobierno valenciano.
No obstante, apuntó que esa cogobernanza requiere transparencia, reciprocidad y reglas objetivas y que se alegra de que la bilateralidad haya funcionado con otras comunidades autónomas pero que, sin embargo, “desgraciadamente, no es el caso de la Comunidad Valenciana, donde la cogobernanza no ha funcionado tan bien".
Puig trasladó a Sánchez que tiene que haber “rigor” en la toma de decisiones y, aunque confía plenamente en la honestidad de los técnicos y por supuesto en los responsables políticos, no comprende el hecho de que no pase toda la comunidad a la fase 1. La decisión, dijo, "la respetamos, pero se debe materializar con indicadores que la sociedad conozca".
El Gobierno pide no trasladar falsos agravios
Por su parte, a portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha pedido este domingo actuar con lealtad y "no trasladar falsos agravios" entre territorios durante la desescalada y ha advertido de que "forzar el ritmo nos puede costar muy caro", tanto desde el punto de vista sanitario, en vidas humanas, como económico.
"Lo realmente grave sería alejarse de ese criterio sanitario y dejarse llevar por consideraciones de tipo político o de cualquier otra índole", ha señalado en rueda de prensa en la Moncloa tras reunirse por videoconferencia el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, con los presidentes autonómicos.
Montero ha asegurado que entiende que pueda haber una cierta decepción en los territorios que seguirán en la fase 0, pero ha insistido en la prudencia: "Correr más de lo que podemos nos puede devolver a esa casilla de salida, y eso no nos lo podemos permitir ni como país ni como sociedad".