Deportistas contra el covid-19 |
(Actualizado

Futbolistas, judocas, nadadoras, triatletas, boxeadores, jugadoras de balonmano o de voleibol pelean en la línea defensiva para frenar el ataque de coronavirus.

Son nuestros héroes que durante esta pandemia del covid-19 aparcan la piragua para enfundarse el uniforme de policía, el bañador para ponerse la bata de médico, el pantalón corto para colocarse una mascarilla de enfermera o cuelga los guantes de boxeo para repartir comida a la población más vulnerable.

Saúl Craviotto, patrullero antes que piragüista

Saúl Craviotto | @policia

"Lo más importante ahora mismo es cuidar nuestra salud y la de los demás”. Estas palabras son repetidas por Saúl Craviotto como un mantra en sus apariciones en medios y en redes tras retomar sus funciones en la Unidad de Prevención y Reacción de la Brigada de Seguridad Ciudadana en Gijón. El medallista olímpico volvió a patrullar las calles una vez confirmado oficialmente el aplazamiento de los Juegos de Tokio al año que viene.

Desde entonces, el elegido para abanderar al equipo nacional compagina su trabajo en el cuerpo con los entrenamientos diarios. Saúl ha confesado lo difícil que fue aceptar la idea de la suspensión temporal, ya que llevaban más de tres años de duro entrenamiento, pero asegura ser muy consciente de que fue la decisión más sensata.

Margot Llobera, de la moto a fabricante de mascarillas

Margot Llobera | Efe

Margot Llobera (Andorra, 1996) ha dejado, por obligación, la moto en el garaje, aunque su sueño de participar por primera vez en el Dakar tiene más gasolina que nunca. Con la pandemia del coronavirus, el lado deportivo pasa a un segundo plano y predomina el humano. Es, como cuenta, voluntaria con la Cruz Roja y fabricante de mascarillas con la impresora 3D que tiene en su casa.

La motociclista ya sueña con cómo será ese abrazo en el reencuentro con sus abuelas cuando pase la epidemia y también en subirse a la moto, momento en el que “habrá que tener cabeza para no hacerse daño” por un exceso de ganas.

Hugo Gaspar, adiós al Benfica: "Ahora sólo soy médico"

Hugo Gaspar | Efe

Es un referente del voleibol en Portugal, capitán del Benfica a los 37 años y desde que comenzó la pandemia Hugo Gaspar es también un ejemplo porque decidió dejar los entrenamientos, se aisló de su mujer e hijos para vivir solo en un apartamento y se dedica en exclusiva a sus 1.800 pacientes de Lisboa.

Hugo Gaspar es médico de familia en un área de salud de Lisboa del distrito de Sacavem y confiesa que, aunque no tiene miedo, siente "ansiedad" al entrar en contacto con posibles contagiados de covid-19, pero insiste en que las puertas del centro están abiertas a todos "para identificar rápidamente los positivos". Su rutina diaria ya no es la de pasar consulta durante ocho horas, entrenar y disfrutar de la familia; ahora se dedica "al 200%" a sus pacientes.

Dice que se siente en la obligación de estar únicamente concentrado en su trabajo de médico, ya que su centro de salud, al que están adscritas 20.000 personas, es la puerta de entrada de pacientes con síntomas y "también está abierta a niños, embarazadas, pacientes de riesgo, etcétera".

Sanjuan, portera y enfermera: "Los sanitarios no somos héroes es nuestra labor"

María Sanjuan | Villarreal CF

La portera del Villarreal femenino María Sanjuan concluyó el pasado mes de junio, con 21 años, la carrera de enfermera y en menos de un año se ha visto inmersa en la primera línea de la lucha contra la pandemia del covid-19, una labor que reconoce que es agotadora y, si bien se mostró orgullosa del trabajo y el esfuerzo de los sanitarios, huyó de la calificación de 'héroes', ya que aseguró: "Es nuestra labor".

"Estas últimas semanas han sido muy duras, tanto física como psicológicamente. Creo que ningún sanitario estábamos preparado para lo que estamos viviendo, pero también nosotros hemos tenido un proceso de adaptación, ha pasado y estamos respondiendo de la mejor manera posible y sé que vamos a poder conseguir parar la curva", señaló en declaraciones facilitadas por su club.

"Estoy trabajando turnos de 12 horas, de ocho a ocho, que se complementan con guardias de atención continuada, o bien de 17 horas, de tres de la tarde a ocho de la mañana siguiente, o guardias de 24 horas", explicó la guardameta, quien agregó: "Al final, los sanitarios héroes no es la palabra, es nuestra labor, es a lo que nos debemos y estamos todos super orgullosos del trabajo que estamos haciendo".

Víctor Rodríguez, futbolista con parálisis cerebral lucha como celador

Víctor Rodríguez | Levante UD

El futbolista del equipo del Levante para personas con parálisis cerebral, Víctor Rodríguez, trabaja como celador en un hospital de Valencia y mandó este jueves un mensaje optimista sobre la recuperación de los enfermos por coronavirus y animó a la sociedad a “vivir y echarle ganas” en este momento tan adverso.

Víctor, que es uno de los jugadores del equipo que el Levante fundó en la temporada 2016-17 para personas con parálisis cerebral y que, además de entrenarse, participa en distintos torneos de fútbol inclusivo, explicó en unas declaraciones facilitadas por el club valenciano cuál es su trabajo estos días.

“Hace poco empecé a trabajar como celador en un hospital de Valencia y la experiencia dentro de la gravedad actual es bastante positiva. Poco a poco parece que va remitiendo la situación. Es una noticia fantástica, esperemos que siga así, vayamos saliendo de la situación y que de una vez por todas se aplane la curva y empecemos a bajar los casos de coronavirus”, dijo el jugador y celador.

Laura Hernández, enfermera y balonmano

Laura Hernández | @LauraHernandez

La jugadora de la selección española de balonmano femenino y del Balonmano Elche y enfermera de profesión, Laura Hernández, afirma que no tiene miedo por estar en primera línea de combate contra el coronavirus, ya que recordó que desarrolla la profesión que eligió por vocación y para ayudar a las personas.

La ilicitana, de 22 años, trabaja desde la pasada semana en el Hospital General de Elche, donde desarrolla su labor en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), en trato directo con las personas contagiadas.

“En esta zona estamos aislados del resto. No tengo miedo por mí, aunque sí por mi familia. De hecho, cuando comencé a trabajar me trasladé a vivir sola en un piso de mi hermana para evitar cualquier contagio”, relata la jugadora, quien finalizó el pasado verano sus estudios de Enfermería.

Hermanos de Alarza, policía y bombero, en primera línea de ayuda en Madrid

Fernando Alarza | Efe

El triatleta Fernando Alarza, bronce en el Mundial de 2016 -que se decidió en Cozumel (México)- y cuarto en el del año pasado -resuelto en Lausana (Suiza)- es una de las figuras del deporte español. Pero, inmersos en la pesadilla de la pandemia del coronavirus, las estrellas son ahora sus hermanos, Jesús Manuel y Daniel, bombero y policía nacional, respectivamente, en Madrid.

"Ya estaban acostumbrados a ver todo tipo de cosas, pero lo que se están encontrando todos estos días no lo habían visto nunca", explicó desde su confinamiento en su Talavera de la Reina (Toledo) natal, Alarza, poco después de completar una sesión de (bici en) rodillo.

Jesús Manuel tiene 35 años y ejerce de bombero en Madrid. Daniel, de 32, es policía nacional en Fuenlabrada, uno de los municipios de la Comunidad madrileña cercano a la capital española. "Se metían en finales de los campeonatos de España y todas esas cosas, pero ya lo dejaron", comenta el menor de los hermanos Alarza.

Iragartze Fernández, una linier en la primera línea de la batalla

Iragartze Fernández | Twitter Comité Vizcaíno de Árbitros

La vida de Iragartze Fernández ha estado marcada por una doble pasión, la enfermería y el arbitraje. Son sus dos profesiones, ambas vocacionales. Ocurre que, al menos durante esta pandemia de covid-19, la primera está ganando peso.

Los estadios de fútbol permanecen clausurados mientras la actividad se multiplica en su otro lugar de trabajo. Al Centro de Salud de Rekalde, en Bilbao, la linier vasca acude cada día "con ganas, con ilusión y con fuerza" para plantarle cara "al gran enemigo".

Solo al volver a su casa se dejará vencer por el agotamiento, por el dolor de cabeza o por el mal cuerpo. "Estar con tanta tensión desgasta", cuenta Iragartze Fernández, "pero prefiero pensar en lo poquito que queda, más que en todo lo que hemos pasado".

Fernando Estévez, de entrenador a médico de urgencias

Fernando Estévez | F.E.

Un entrenador de fútbol y un doctor tienen pocas cosas en común salvo que te llames Fernando Estévez, un técnico joven con un destacado bagaje en Segunda B que, además, acumula una amplia experiencia como médico de urgencias y que estas semanas pelea en la línea defensiva para frenar el ataque de coronavirus.

Estévez, granadino de 41 años, lleva más de media vida dedicada, a partes iguales, al fútbol y a la medicina, compatibilizando casi siempre dos profesiones que "no tienen similitudes", según explica justo tras ver un encuentro antiguo que quería repasar y antes de entrar de guardia.

"Ser entrenador y médico son cosas muy diferentes. En una ambulancia o un box de urgencias trabajas con un equipo de personas muy reducido y eso es más fácil de manejar que una plantilla de 25 jugadores", comenta sin dudar. Estévez añade que "cuando atiendes una urgencia apenas te da tiempo a pensar, está todo muy protocolizado y es todo más cerrado", mientras que "el fútbol es más complejo".

Débora Torreira, del balonmano a policía en Gijón

Débora Torreira | Efe

El primer día que se puso el uniforme, todavía en periodo de prácticas, Débora Torreira (Santo Domingo, 1991) se dio cuenta de la responsabilidad que asumía. Ser Policía Nacional había sido su sueño desde niña. Incluso dejó de lado el balonmano durante casi tres años para preparar la oposición y conseguir su plaza.

Esa actividad, que ahora compagina con los entrenamientos y con los partidos en el Liberbank Gijón, guía su rutina durante el confinamiento. Pese a la pandemia de covid-19, ella sigue manteniendo su juramento. "Muchas personas nos ven como héroes, pero solo cumplimos nuestro deber. Es nuestro trabajo defender a España, defender a los ciudadanos y cuidarlos", subraya

Con sumo respeto a la enfermedad y guardando precauciones higiénicas -como llevar guantes y mascarilla o lavarse las manos "cada dos por tres", explica- Débora Torreira sigue ejerciendo su profesión. Así suele llenar, habitualmente, sus mañanas. Después le queda tiempo para continuar sus estudios de criminología y para ejercitarse..

Toni Dovale, entre el fútbol y la botica

Toni Dovale | Efe

Toni Dovale, jugador formado en la Masía del FC Barcelona y trotamundos del balón en los últimos años, ayuda a combatir la covid-19 en la farmacia que su familia tiene en La Coruña mientras espera que la pandemia le permita centrarse de nuevo en el fútbol, ya con una lección aprendida: "No podemos hacer muchos planes a largo plazo".

A él, el coronavirus le pilló preparando las maletas para regresar a Tailandia, su último destino futbolístico tras haber pasado por distintos clubes de España (Celta, Huesca, Leganés y Rayo), Estados Unidos (Kansas), India y Chipre.

"Como a la mayoría de los españoles, mi vida ha cambiado bastante. Acabé la temporada en la India antes de Navidad, que es el parón grande en el mercado asiático; estaba preparando todo para marcharme para jugar allí otra temporada y el tema empezó a complicarse", explica.

Clàudia Dasca: "Lo que más me impacta es el compañerismo en el hospital"

Clàudia Dasca Romeu | Twitter

Clàudia Dasca Romeu (Sabadell, 1994) no se lo pensó ni un segundo cuando hace unas semanas llegó una propuesta a los estudiantes de sexto de Medicina de la Universidad Autónoma de Barcelona para cubrir plazas en Can Ruti (Badalona), obviamente, no para ejercer, sino para cumplir una labor también fundamental: mantener informados a los familiares del estado de los ingresados por el coronavirus.

La joven aspirante a médico (25 años) desea acabar este año los estudios de medicina y entrar en el MIR el año que viene, después de que hace unos años decidiese que su vocación y la natación de alto rendimiento no podían compartir espacio.

"Es una labor telefónica porque los enfermos están incomunicados y las familias no pueden venir al hospital", señaló Dasca, quien cuando se le preguntó sobre el impacto que está teniendo en su vida esta experiencia, respondió: "Lo que más me impacta es la humanidad y el compañerismo que estoy viendo. Se ha incorporado mucha gente nueva y esto ha evitado el colapso emocional. Hay mucho compañerismo y mucha solidaridad entre todos".

Buendía, de la cancha a médico en Málaga

Francisco Javier Buendía | Efe

Francisco Javier Buendía fue jugador de la selección española de voleibol y ahora, a sus casi 60 años y como médico del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en Málaga, lucha día a día junto con sus compañeros en la primera línea de batalla contra la pandemia de coronavirus, en su caso recorriendo la ciudad en una ambulancia.

En la actual situación de emergencia y de confinamiento de la población, con la pandemia de la covid-19 golpeando fuerte, al malagueño le ayudan en su comprometida y difícil tarea diaria la fuerza mental y la experiencia de sus años en el deporte de alto nivel, en equipos como el antiguo Puerto Malagueño y el Cisneros de Tenerife.

Durante esta pandemia, como todos sus compañeros, está multiplicando las horas de esfuerzo y dedicación desde su puesto de médico del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), antes llamado Dispositivo de Cuidados Críticos y Urgencias, y explicó que atiende un mínimo de entre seis y ocho avisos prioritarios por turno -de 12 a 15 al día-.

Ana Martínez, balonmanista y médico

Ana Martínez | Agencias

La jugadora del Balonmano Elche y de la selección española, Ana Isabel Martínez, quien tras acabar la carrera de medicina se ha ofrecido a colaborar y luchar contra el coronavirus, afirmó que las medidas de prevención tenían que haber llegado antes ante la gravedad de la situación sanitaria.

La jugadora, que terminó la carrera en febrero, aún no ha podido obtener el título oficial por circunstancias administrativas derivadas del confinamiento y no puede ejercer en la primera línea de atención médica, pero está apuntada en la bolsa de ayuda no asistencial, en la que a través del teléfono atenderá las consultas de personas que necesiten colaboración para identificar los síntomas de la enfermedad.

La jugadora internacional confesó que ha aprovechado sus conocimientos médicos para insistir a sus familiares y amigos en la importancia del confinamiento como medida esencial para reducir los contagios y admitió que durante esta cuarentena apenas piensa en su otra faceta como deportista.

Omar Tayara, un triatleta olímpico en la carrera por los sanitarios

Omar Tayara | Efe

La misma constancia que llevó a Omar Tayara a recorrer kilómetros y kilómetros nadando, en bicicleta y a pie hasta participar como triatleta en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 representando a Siria es la que aplica en la lucha contra el coronavirus.

Deportista y actual empresario encaró la crisis al frente de Taymory, una de las compañías de referencia a la hora de elaborar material técnico para triatlón y ciclismo. La pandemia le ha obligado a replantear su exitoso proyecto pero en lugar de cruzarse de brazos y esperar a que todo pase, ha optado por dar un paso al frente.

Para ello se ha servido de dos grandes armas, la voluntad de ayudar y su capacidad productiva. Una y otra fueron el primer eslabón de una cadena solidaria que arrancó con un whassap y ahora sirve para surtir de material sanitario a diversos hospitales.

Leire Iglesias: "La lucha contra el coronavirus es como preparar combate de judo"

Leire Iglesias | Agencias

Leire Iglesias, ex judoca, subcampeona de Europa y enfermera en el Hospital General de Alicante, afirmó que la batalla diaria contra el coronavirus es similar a la preparación de un combate que realiza un judoca de élite.

Bilbaína de 42 años y con una medalla de bronce en los Juegos del Mediterráneo y un diploma olímpico en los Juegos Olímpicos de Pekín en su palmarés, Iglesias ejerce actualmente de enfermera y está en contacto permanente con los infectados por el covid-19 en Alicante, donde reside desde su retirada de la competición.

Iglesias insistió en que como profesional de la sanidad afronta la batalla como si fuera un combate de judo "porque se necesita contar con un entrenador, en este caso una supervisora, que dirija al equipo y que desarrolle una táctica".

Jaime Pérez, voleibolista y médico

Jaime Pérez | Efe

Jaime Pérez, jugador internacional de voleibol de Río Duero Soria y médico de profesión en una empresa de prevención de Riesgos Laborales, está a la espera de una llamada para "echar una mano" en el hospital Santa Bárbara de Soria y combatir la pandemia del coronavirus.

Pérez, con una larga trayectoria deportiva a sus 34 años, ha señalado que está a disposición del Sacyl "para si hay que echar una mano en el hospital", pero de momento no ha recibido llamada.

Ahora, en pleno estado de alarma, en su trabajo en una empresa de prevención de riesgos laborales sólo realiza reconocimientos urgentes a trabajadores, para valorar los que puedan ser vulnerables por su patología al virus.

Marina Muzas aparca el disco para aprender a salvar vidas

Marina Muzas | Efe

Cuando Marina Muzas (Badalona, 1994) decidió que quería dedicarse a la medicina no se imaginaba que empezaría su carrera profesional salvando vidas en mitad de una pandemia. Por entonces la mayor parte de su tiempo lo dedicaba a su gran pasión, el atletismo, donde destacaba en el lanzamiento de disco.

Muzas, campeona de Cataluña en esta disciplina, peleaba por abrirse camino en los campeonatos de España, donde había logrado subir al podio en alguna ocasión en categoría júnior y promesa, mientras se preparaba para empezar la universidad.

Ocho años después, sigue dedicando buena parte de su tiempo al atletismo (defiende los colores del UGE Badalona, aunque se entrena con el grupo de lanzadores de Santa Coloma de Gramanet). Pero hace tres semanas que cambió la ropa de deporte por una bata de médico y el tartán por la sala de urgencias de un CAP de su ciudad.

“Hola, soy Javier Castillejo y le traigo su compra”

Javier Castillejo

"Hola. Soy Javier Castillejo y le traigo su compra”. Esta frase la oyen muchas personas mayores de Parla cuando abren la puerta de sus domicilios para recibir su comida y no ven a otro que a El Lince, el boxeador español más laureado de la historia, campeón del mundo en ocho ocasiones en dos categorías diferentes, peso superwelter y medio.

Castillejo no ha dudado a la hora de poder echar una mano en la crisis que vivimos con la pandemia del coronavirus y a través de Cruz Roja acerca productos alimentarios a la gente mayor, considerada población de riesgo, de su Parla natal que gracias a su exitosa carrera como boxeador llevó por todo el mundo.

Olga Doménech, del waterpolo al hospital

Olga Doménech

El confinamiento de la waterpolista del CN Terrassa Olga Doménech duró una semana. El tiempo necesario para dejarlo "todo en orden" y ver que podía "ayudar más en un hospital que estando en casa".Desde el 23 de marzo ejerce de enfermera en el Hospital Parc Taulí de Sabadell en una de las plantas destinadas a pacientes enfermos por el coronavirus.

Como para tantos otros deportistas de élite, la vida cambió para la cinco veces campeona de Europa con el Astralpool Sabadell al decretarse el estado de alarma. Sin actividad en la piscina y obligada a cerrar la cafetería que tiene en el barrio barcelonés de Gracia, a la waterpolista se le abrió otra puerta.

Inconformista e inquieta como pocas, se lanzó a buscar un centro asistencial donde poner en práctica sus conocimientos de auxiliar de enfermería y técnica en documentación sanitaria. Lleva la waterpolista en los genes la enfermería con una madre auxiliar de clínica y un padre enfermero de psiquiatría ya retirado.

García Ortiz, árbitro ACB y policía

José Ramón García Ortiz | Efe

Salir a la ventana a aplaudir cada tarde la labor de los profesionales que luchan contra la pandemia se ha convertido en la gran expresión de gratitud colectiva de millones de españoles. Un aliento que percibe como policía local el árbitro de baloncesto de la Liga Endesa José Ramón García Ortiz.

"Nosotros nos sentimos aludidos con ese reconocimiento diario Cuando pasamos a las 20.00 horas por la ciudad la gente nos aplaude, nos anima, lanza gritos en favor de la policía, reconociendo la labor que se hace en la calle... Es muy emocionante", explica el árbitro internacional y policía local en San Fernando (Cádiz).

José Ramón García Ortiz lleva casi treinta años compatibilizando el silbato y el parqué -más de 800 partidos dirigidos en la máxima categoría del baloncesto español, sin contar la Euroliga- con su profesión como policía, cuya actividad ha cambiado radicalmente en estos días.