El Ayuntamiento de Móstoles ha anunciado que gran parte de los 643.347 euros recibidos por parte de la Comunidad de Madrid, del dinero adelantado por el Ejecutivo central, se destinará a contratar personal de refuerzo para dar respuesta a los usuarios de la Residencia de Juan XXIII.
En concreto, el Gobierno municipal destinará 335.638,94 euros a dicho fin para garantizar la atención, entre otros, a los mayores de la Residencia de Juan XIII y las personas dependientes que residen en sus domicilios, según destaca el consistorio en una nota.
Entre el personal de refuerzo habrá trabajadores sociales, psicólogos y educadores para dar una respuesta inmediata a todos los que solicitan algún tipo de ayuda social en el ayuntamiento, de manera que, de media, todos los afectados reciban una solución de ayuda el mismo día que solicitan.
El Gobierno municipal invertirá otros 254.177,28 euros en la atención a las personas más vulnerables, que se centrará, sobre todo, en "cubrir las necesidades inmediatas más básicas de estas personas, ya sean alimentarias, de medicación, ayudas para los suministros de gas, luz y agua o las becas de comedor.
Se incluye también una partida -por un valor de 12.490 euros- para la compra de material de protección individual que minimice el riesgo de contagio, tanto para los trabajadores municipales como para las personas atendidas en los distintos centros o domicilios.
Además, también habrá una cuantía de 40.041 euros para la atención de las personas sin hogar, después de que se haya ampliado la campaña de frío en el centro de atención de Punto Omega, que estaba previsto que terminase el 31 de marzo, pero que finalmente se extenderá hasta que finalice el estado de alarma.
"Desde el inicio de la crisis del coronavirus, a través de la Concejalía de Derechos Sociales, se ha trabajado sin descanso para garantizar que ningún ciudadano se queda atrás", insisten desde el consistorio, que recuerda que se han activado diferentes líneas telefónicas para atención social urgente a familias vulnerables.
También se garantiza, a través del restaurante municipal, el servicio de comida a domicilio o ayudas de emergencias la comida a todos los menores que hasta el inicio de esta crisis recibían becas de comedor y se ha reforzado la ayuda y la atención a domicilio a los mayores.