Sanitarios trabajando en el hospital de campaña de Ifema |
(Actualizado

El Gobierno y la Comunidad de Madrid han hecho un llamamiento para incorporar profesionales sanitarios que ayuden en la crisis sanitaria del coronavirus ante la saturación del sistema por el aumento, día tras día, de nuevos contagios. En ese llamamiento se incluye, por ejemplo, a profesionales médicos y de enfermería jubilados en los dos últimos años para que se reincorporen y echen una mano a los compañeros agotados que trabajan sin descanso en la lucha contra esta enfermedad. Una situación que pone entre la espada y la pared a muchos retirados, que entienden que al pertenecer por edad a los grupos de riesgo del Covid-19 puede peligrar su salud si atienden a contagiados.

"Te proponemos que mañana te incorpores al trabajo yendo al hospital que se ha preparado en Ifema"

"Te proponemos que mañana te incorpores al trabajo yendo al hospital que se ha preparado en Ifema". Asi se expresa en algunas de las llamadas que el Gobierno regional, desde la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Madrileño de Salud, está realizando a muchos exprofesionales sanitarios para que vuelvan a trabajar. La sorpresa para algunos jubilados recientes es mayúscula. Algunos aceptan, pero otros se niegan. Y el conflicto moral para estos últimos se acrecienta con el paso de las horas. Más aún cuando al otro lado del teléfono se recrimina sutilmente que no haya una respuesta positiva.

Alguno de estos jubilados, que quieren permanecer en el anonimato, no entienden que siendo grupo de riesgo por su edad ante el coronavirus sean 'llamados a filas' para esta crisis, estando por ejemplo en el hospital que se ha montado en Ifema, que atenderá a miles de contagiados por el Covid-19. Los comentarios de excompañeros que están trabajando en hospitales, quienes denuncian la falta de material de protección, no animan nada a arriesgarse.

El Ministerio de Sanidad ha confirmado este lunes que hasta 3.910 profesionales sanitarios en España están afectados por la infección. Más concretamente en Madrid, hasta 2.000 sanitarios están fuera de servicio, de los cuales 600 han dado positivo de Covid-19, mientras que 1.400 están en cuarentena.

En Madrid hasta 2.000 sanitarios están fuera de servicio, 600 tras dar positivo por coronavirus

Fuentes del sindicato Satse consultadas por Telemadrid.es señalan que la "incorporación de enfermeras y enfermeros jubilados debería realizarse como uno de los últimos recursos y siempre con carácter voluntario para todas ellas y ellos".

"Llegado el caso -añaden- Satse entiende que los jubilados solo deberían ocupar puestos en los que no tengan que mantener contacto con pacientes confirmados o con sospecha con coronavirus". "Dada la especial vulnerabilidad de las personas de más edad, hay que garantizar en todo momento su propia seguridad y salud. Por ello, desde la organización sindical se insiste en que las enfermeras y enfermeros jubilados solo deben trabajar, y con carácter voluntario, en aquellas unidades o centros donde se preste asistencia a pacientes que no impliquen este tipo de riesgo para su salud", concluyen.

"Los jubilados solo deberían ocupar puestos en los que no tengan que mantener contacto con pacientes confirmados o con sospecha con coronavirus"

Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) se apunta a Telemadrid.es que todo el personal médico que pertenezca a un grupo de riesgo o tenga una especial vulnerabilidad, "tiene varias tareas asequibles para poder formar parte de esta lucha contra la pandemia por coronavirus, como puede ser el seguimiento telefónico de pacientes, pero no tienen por qué situarlo en los frentes de más riesgo".

"El consejo sería que soliciten, como nosotros ya estamos haciendo, la incorporación o reincorporación a la labor asistencial, pero en un puesto donde no estén en primera línea de combate contra el virus", añaden.

"El consejo sería que soliciten un puesto donde no estén en primera línea de combate contra el virus"

El Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid aboga por que los jubilados podrían colaborar "sin exponerse a riesgo por edad asesorando o haciendo seguimiento por teléfono, sin necesidad de contacto físico".

Cerca de 5.000 contrataciones

La Consejería de Sanidad madrileña ha reforzado en los últimos días la plantilla sanitaria de los diferentes centros y servicios de "forma excepcional" con un total de 4.900 contrataciones, que contemplan a estudiantes del MIR que no obtuvieron plaza de especialista, a estudiantes terminando las carreras de Enfermería y Medicina, o médicos y enfermeros jubilados, entre otros.

Estos contratos se han realizado en los diferentes servicios y centros del servicio de salud madrileño (Hospitales, Atención Primaria y SUMMA 112), y en los servicios de salud pública en diferentes categorías: médicos, enfermería, técnico en cuidados auxiliares, celadores, técnicos en laboratorio, técnicos de radiodiagnóstico, conductores y administrativos. Para hacer frente a la crisis sanitaria por el Covid-19, Madrid también permitirá contratar de forma excepcional personal según las necesidades de cada centro, "que en otras circunstancias no sería posible, dada su situación laboral, académica o sindical".

El hospital de campaña habilitado por la Comunidad de Madrid en Ifema podrá atender a lo largo de esta semana a 1.300 pacientes con coronavirus en los módulos que se están habilitando en los pabellones 7 y 9 de los recintos feriales. El director médico de este hospital provisional, Antonio Zapatero, ha confirmado que en el pabellón 5 “tenemos 126 pacientes y la proyección para hoy es recibir 90 más”, alcanzado una cifra de ingresos total mañana martes de unos 250 ó 260 pacientes.

El caso de Jean-Jacques Razafindranazy

En las últimas horas se ha conocido desde Francia el caso de Jean-Jacques Razafindranazy, un médico de 68 años que ha muerto por coronavirus y se ha convertido en el nuevo héroe del país galo. Con edad para jubilarse, Razafindranazy seguía en activo y decidió continuar al frente para luchar contra el Covid-19 en el hospital donde trabajaba, en la localidad de Compiègne, al noreste de París. Es, además, el primer facultativo fallecido por esta enfermedad en Francia.

En redes sociales, son varios los especialistas médicos que ven contraproducente que sanitarios jubilados regresen y estén en primera linea de batalla contra el coronavirus.