La Cabalgata de Reyes estática, una solución para esta Navidad que ya es una realidad en Madrid

Las cabalgatas de Reyes son uno de los grandes acontecimientos de la Navidad y este año corren peligro por culpa del coronavirus. Madrid capital ha decidido suspender ya los desfiles de los distritos y tiene en seria duda la gran cabalgata del 5 de enero por el centro de la ciudad. En el resto de municipios de la región también se tomarán decisiones definitivas en las próximas semanas. Alcobendas, por ejemplo, ya ha decidido suspender la suya. En este panorama se presenta una posible solución: la cabalgata estática.

Esta iniciativa se va asomando poco a poco en España. Cataluña, por ejemplo, la ha propuesto a sus municipios. En Vigo la decisión es una realidad y su cabalgata será estática el 5 de enero.

Y en Madrid ya hay un municipio que ha confirmado su cabalgata estática: San Sebastián de los Reyes. La localidad ha decidido modificar su tradicional cabalgata de Reyes, que habitualmente recorría sus calles más importantes el 5 de enero, y ha diseñado una versión de ‘cabalgata visitable y estática”, con 13 carrozas que los vecinos podrán admirar desde cierta distancia.

El Ayuntamiento explica en un comunicado que está organizando un dispositivo especial para que la tarde del 5 de enero se coloquen las carrozas en un espacio seguro, donde los interesados puedan visitarlas entre las 17:00 y las 21:00 horas, con cita previa y eligiendo tramos de horarios.

La Cabalgata estática funcionará como un Belén Viviente

Este evento navideño, a modo de Belén Viviente, contará con la animación de las asociaciones del municipio y la presencia de los Reyes Magos, que “estarán atentos y saludando a todas las personas que pasen por el recorrido”.

En cuanto a los habituales caramelos, este año no serán lanzados desde la cabalgata, sino que serán distribuidos por los pajes de los Reyes Magos en bolsas individualizadas.

Por otro lado, para garantizar que nadie se quede sin ver a los Reyes Magos, las carrozas se podrán visitar en una carpa los días 2, 3 y 4 de enero, también con control de aforo.

Para ambas instalaciones serán habilitados controles de temperatura y dispensadores de gel hidroalcohólico a la entrada y serán marcadas las pautas de seguridad con carteles.

No obstante, el área de Festejos subraya que la reorganización o suspensión del evento queda supeditada a las normas sanitarias vigentes en ese momento, “que no sólo dependen del Consistorio”.

La cabalgata estática puede ser una realidad en otros municipios madrileños, que podrían confirmar la suya de cara a unas Navidad que, sí o sí, serán las más atípicas que se hayan viviendo en los últimos años.