‘Huellas de elefante’ se adentra en la vida de Raphael, el artista irrepetible
Con Terelu Campos, Ángel Antonio Herrera, Luis del Val y Marina Castaño como invitados al programa
Comunicación Telemadrid
Con él llegó el escándalo. Raphael, a ratos contradictorio, y a veces polémico, es sin duda el artista que no se parece a nadie. Su talento, su voz, y su característica forma de interpretar, le ha valido el éxito con el que convive. Una larga trayectoria que le mantiene todavía en los escenarios, con el cariño de su público, y que este miércoles, a las 22.30h, será recordada en ‘Huellas de Elefante’, el nuevo programa de grandes biografías que presenta Goyo González en Telemadrid.
Para esta ocasión, Telemadrid ha reunido a cuatro invitados que conocen de cerca al artista de Linares: los periodistas Ángel Antonio Herrera y Terelu Campos, la escritora Marina Castaño y el periodista y biógrafo de Raphael, Luis del Val.
Nacido pobre y en Linares, Raphael vino a Madrid, llegó a mendigar para sobrevivir y a vivir en una habitación en un pequeño piso en el madrileño barrio de Carabanchel. A los 22 años sacó su primer disco y desde ahí su carrera ha sido un constante ascenso hasta lo más alto. Volvió a nacer cuando recibió un hígado nuevo en un trasplante en 2003.
La vida de Raphael comienza en Linares, Jaén. Rafael Martos Sánchez nace en esta localidad jienense el 5 de mayo de 1943 como el tercero de cuatro hermanos. Aunque solo nueve meses después, los Martos se mudarían a Madrid. Son una familia más de emigrantes entre las muchas que llegan a la capital durante la posguerra.
Del Festival de Benidorm al de Eurovisión
Con 9 años viaja a Salzburgo, Austria, para participar en un festival de coros. El pequeño Falín, como le llaman en casa, logró allí el premio a la mejor voz infantil de Europa. En julio de 1962 es el gran triunfador del Festival de Benidorm. El jurado, del que forman parte la actriz Carmen Sevilla y su marido Augusto Algueró, se queda impresionado con la interpretación de Raphael. Ningún asistente había visto antes algo parecido. En 1966 y en 1967 representó a España en el festival de Eurovisión con las canciones “Yo soy aquél y “Hablemos del amor”, respectivamente. Queda séptimo la primera vez y sexto la segunda. No gana, pero como cuenta él mismo años después, Raphael vuelve a España como un héroe nacional. Tras su paso por Eurovisión, su fama traspasa todas las fronteras y graba “Yo soy aquel” en inglés, italiano, alemán y francés.
Su nombre no sólo interesa a las discográficas, el cine también lo reclama. Tras el rodaje de su primera película “Cuando tú no estás”, llega “Al ponerse el sol”, un auténtico éxito. Raphael recorre toda España durante su estreno. Según sus propias memorias, la prensa valora el éxito del filme de una manera muy particular: dependiendo de las puertas de cristal que rompan sus fans.
A estas aturas el nombre de Raphael es conocido en el mundo entero. Prácticamente no pasa tiempo en España.
América también se rinde ante él. Tenía sólo 25 años cuando toda la prensa de Nueva York refleja en sus páginas el éxito de Raphael en dos noches consecutivas en el mítico Madison Square Garden. La crítica norteamericana define al cantante como una mezcla entre Bob Dylan, Elvis Presley y Tom Jones.
Raphael, protagonista indiscutible de portadas y eventos, también fue el centro de titulares polémicos que ponían de relieve su enemistad con otro gran artista español: Julio Iglesias. La prensa también se hacía eco de los cruces de insulto entre ambos cantantes, enemistad que sellaron con un emotivo abrazo tras más de diez años sin hablarse. El clan Flores al completo fue testigo de la reconciliación durante una gala en Miami.
El 11 de abril de 2018 recibió, de la mano de Manuela Carmena, el título Hijo Adoptivo de Madrid junto a Pedro Almodóvar. Hoy Raphael tiene 75 años y lo ha conseguido prácticamente todo. 350 discos de oro y 50 de platino, un disco de uranio, un museo a su nombre, centenares de galardones internacionales y nacionales… Su matrimonio con Natalia Figueroa, que dura casi 5 décadas, le ha dado 3 hijos, y con el tiempo han venido 8 nietos.