El Atlético de Madrid, sin pegada ofensiva en la primera media hora, concedió un empate frustrante contra el Espanyol, superviviente entonces pero solvente después para reducir al conjunto rojiblanco a un empate sin goles en el Metropolitano, con dos goles anulados por fuera de juego a Riquelme
El primer tiempo comenzó con un dominio absoluto del conjunto rojiblanco, con suficientes ocasiones para haberse adelantado en el marcador, pero que continuó con la reacción rival y con algún susto para Jan Oblak.