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La taekwondista madrileña Adriana Cerezo consiguió este miércoles la segunda medalla de la delegación nacional en el Campeonato del Mundo de Taekwondo que se está disputando en Bakú tras quedarse con el bronce en la categoría de -49 kilos.

La joven deportista madrileña, de 19 años y actual subcampeona olímpica del peso, volvió a demostrar su calidad en una gran competición, aunque como le pasó el año pasado en el Europeo, se le resistió por muy poco el pelear por el oro.

Cerezo logró su primera medalla mundial, la cuarta de su palmarés tras el oro continental de 2021, la plata olímpica de 2021 y el bronce continental de 2022, después de un concurso muy firme y de tener nervios de acero en la pelea por el podio.

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La deportista de Alcalá de Henares derrotó con mucha autoridad por sendos 2-0 a la hongkonesa Siu wai Lam y a la uzbeca Madinabonu Mannopova para meterse en los cuartos de final.

Ahí le espera una rival de mucha más entidad como la china Qing Guo, actual subcampeona del mundo y que le puso en muchas dificultades pese a perder el primer asalto. La madrileño cedió el segundo y estuvo contra las cuerdas en el tercer y definitivo cuando arriesgó con éxito para adjudicárselo en el último suspiro y asegurarse el bronce.

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Cerezo se cruzaba en las semifinales con la turca Merve Dincel, la rival con la que había caído en la misma ronda en el último Europeo y que se volvió a cruzar finalmente en su camino.

Tras empatar en el primer asalto, la campeona de Europa se lo apuntó por los registros, y en el segundo, supo defenderse a la perfección para no dar opciones a la española, que se tuvo que conformar con un valioso bronce, el segundo para la delegación tras el del también madrileño Adrián Vicente en -59.