| Telemadrid
(Actualizado

Alba Torrens, alero de la selección española de baloncesto que se dispone a afrontar el Mundial de Turquía con las más altas espectativas, declaró que en el equipo no se ponen "techo" y que tras ser campeonas de Europa el año pasado en Francia vuelven a "empezar de cero".

Tras ser campeonas de Europa el año pasado ahora toca intentar refrendar el éxito en un Mundial. Una dura prueba.

Creo que es mucho más fácil competir tras un éxito siempre que tengas claro que aquello forma parte de un pasado inolvidable, pero que ahora ya es historia. Estamos muy centradas en la dificultad que supone un Mundial donde ya en la preparación hemos podido comprobar que hay selecciones de muchísimo nivel.

¿Quienes serán los principales rivales en Turquía?

En categoría femenina cualquiera te puede sorprender. Está claro que todas identificamos a las favoritas. Estados Unidos podría hacer dos o tres equipos diferentes y con todos ser claro candidato al oro. Después, hay una serie de equipos a un nivel superior al resto como Australia, Francia o Turquía, reforzado por el hecho de jugar en casa; pero para nosotras el Mundial sólo tiene un partido: el España-Japón del 27 de septiembre. Estamos centradas en empezar ganando.

A las otras dos selecciones de nuestro grupo -Brasil y República Checa- las conocemos y sabemos que serán los siguientes pasos a dar en el denominado grupo de la muerte, pero queremos ir partido a partido.

Tras la retirada de Amaya Valdemoro y Elisa Aguilar ¿siente una responsabilidad mayor que sus compañeras por su dimensión internacional?

No. Creo que todas queremos coger la responsabilidad que nos toca para aportar el máximo al equipo y conseguir hacer un buen juego. Tenemos la suerte que en este equipo son muchas las jugadoras que pueden coger la responsabilidad en momentos clave.

En este sentido, Laia Palau es la que asume la capitanía del equipo.

Laia es una jugadora diferencial que ejerce el liderazgo de forma individual, como comentábamos antes. No necesitaba ser la capitana para ser una pieza fundamental en la pista y en el vestuario. Ella es una de esas líderes que predica con el ejemplo y uno de ellos es su trayectoria. Acaba de cumplir 200 partidos internacionales.

¿Ha soñado con verse el día 5 de octubre subida a un podio mundial?

Todas tenemos nuestros sueños pero la mejor manera de afrontarlos es trabajando y siendo realistas. Sólo pensamos en el primer partido. Volvemos a empezar de cero con el único objetivo de sacrificarnos y disfrutar jugando. No nos ponemos techo pero es el campeonato el que nos tiene que buscar un sitio. No ningún sueño.

El programa Universo Mujer está envolviendo los pasos de la selección femenina ¿qué le parece esta iniciativa?

Sólo puedo tener palabras de elogio. Para nosotras que la Federación apueste con recursos económicos y humanos por nuestro deporte es un privilegio y un ejemplo. Es muy positivo el proyecto de Universo Mujer esté ayudándonos a promocionar el baloncesto y el valor de la mujer.

El principal objetivo de ese programa es organizar en España el Mundial femenino de 2018. ¿Le gustaría estar en ese Mundial?

Me encantaría poder disputar un Mundial en casa. Desde la Federación, y en especial nuestro presidente, se está haciendo un gran trabajo para intentar que en el 2018 el Mundial se dispute en España. Sería algo muy bonito.

¿Estímulo o presión?

Siempre estimulo. Ver como las jóvenes ganan campeonatos de Europa o compiten hasta la final en Mundiales quedándose a las puertas de sorprender a las americanas, como sucedió con las U17, siempre es un orgullo y un estímulo porque además asegura que nuevas generaciones se vayan asomando a la selección progresivamente. Desde la base se está haciendo un gran trabajo. EFE