CSKA Moscú y Real Madrid, los dos clubes más laureados de Europa, con siete y nueve títulos en la máxima categoría, respectivamente, están citados en Belgrado en la Final Four de la Euroliga para buscar una plaza en la final que pueda agrandar su ya extenso palmarés.
El CSKA llega con la baja del escolta francés Leo Westermann y algunas dudas sobre el también escolta francés Nando de Colo y el pívot el estadounidense Kyle Hines, aunque ambos, tras estar ausentes un par de semanas por lesión, ya volvieron al equipo el pasado domingo en la VTL rusa en la victoria del CSKA sobre el Parma Perm, con 17 puntos de De Colo en 19 minutos.
VUELVE CAMPAZZO
El Real Madrid, que ha ido recuperando jugadores tras una temporada infernal en lo que a lesiones se refiere, tiene la duda del base argentino Facundo Campazzo. "Ya sabíamos iba a llegar muy justo", anunció su entrenador Pablo Laso, que también dijo que si tiene que jugar "jugará".
Será un auténtico choque de trenes entre dos de los mejores equipos del continente. Los rusos son unos auténticos especialistas en llegar a la Final a Cuatro, con quince presencias en las últimas dieciséis ediciones, aunque con tan solo tres títulos. Los españoles con cinco de las últimas seis sólo consiguieron el de 2015.
ANTE SERGIO RODRÍGUEZ
En cualquier caso son dos superequipos con calidad y recursos en todas las posiciones, en ataque y en defensa, bajo el aro y en el perímetro. CSKA y Real Madrid se conocen y se respetan. El equipo ruso se ha reforzado con dos ex del Real Madrid: Sergio Chacho Rodríguez y Othello Hunter.
Lo del Chacho está siendo de traca porque ha hecho olvidar a todo un ídolo en Moscú, el serbio Milos Teodosic, y con su juego, sus asistencias y sus puntos está siendo un pilar fundamental para el griego Dimitrios Itudis, entrenador del CSKA.
Hunter ha reforzado el puesto de pívot en un equipo que apuesta por jugadores no tan altos como otros, pero más rápidos, saltarines y efectivos. Aún así la prensa rusa señala que el poder de los hombres altos del Real Madrid supera al de los rusos. En la Liga Regular cada equipo ganó en su cancha, pero poco o nada valen ahora esos u otros antecedentes. Es el aquí y ahora.
EL MAL RECUERDO DE 2017
Los jugadores del Real Madrid se han juramentado para "ser el Madrid" en Belgrado. El año pasado en la semifinal ante el Fenerbahce perdieron y dieron una muy mala impresión. Eso se les quedó grabado.
Este año las lesiones han obligado a los jugadores del Real Madrid a dar no uno sino varios pasos adelante para ser competitivos pese a las bajas. Lo lograron con creces y en la eliminatoria ante el Panathinaikos, con el campo en contra, encontraron la fuerza moral necesaria para estar en Belgrado con opciones.
CON 'HAMBRE'
Por si fuera poco, los chicos de Laso hablaron antes de su llegada a la capital serbia del hambre que tenían tras haber perdido los últimos títulos de Liga ante el Valencia y de la Copa del Rey ante el Barcelona.
Con todo esto y el aviso del preparador madridista de que para ganar habría que "jugar al baloncesto", porque no todo "es controlable" por los técnicos, la resolución puede estar basada, como casi siempre, en los pequeños detalles, en las segundas opciones, en las ayudas en defensa, en los tiros liberados y en el acierto de cualquiera en el momento clave.
CSKA Moscú y Real Madrid, dos 'Grandes de Europa' vuelven a enfrentarse. El ganador agrandará un poco más su leyenda, sobre todo si acaba conquistando el título.