El belga Yannick Carrasco, extremo del Atlético de Madrid, responde con goles, tres al Granada y cuatro ya esta temporada, al desafío de ser un jugador determinante que le plantea el técnico argentino Diego Simeone, que insiste día a día al extremo en que tiene "que patear y marcar gol".
"Al arco, al arco Carrasco", le gritaba el técnico el pasado miércoles durante un momento del entrenamiento en la Ciudad Deportiva de Majadahonda, en un ejercicio de definición sobre la portería contraria. Tres días después, el extremo marcó tres goles y provocó la rotunda remontada de su equipo frente al Granada (7-1).
PRIMER TRIPLETE DE SU CARRERA
"Es verdad que siempre me está diciendo que tengo que patear y que marcar gol. He marcado tres goles, por eso el entrenador está muy feliz y por eso el tercer gol fue para él", destacó el extremo, sonriente, minutos después del primer triplete de su carrera, con el balón camino de su casa firmado y dedicado por sus compañeros.
"Me han puesto palabras muy bonitas", declaró Carrasco, que anotó el 1-1 al aprovechar un balón suelto en el área, que logró el 2-1 con un disparo afortunado, que se coló en la portería del mexicano Guillermo Ochoa tras tocar en el defensa del Granada Tito, y que hizo el 3-1 con un derechazo tras un pase de Antoine Griezmann.
Tres goles en menos de media hora, entre los minutos 33 y 61 del partido, para la remontada del Atlético. "Muy contento por Yannick. Es una lucha que tenemos diaria con él para que sea lo que fue hoy -por el sábado-, un jugador determinante", valoró minutos después Simeone en rueda de prensa sobre la figura indiscutible del partido.
SIMEONE: "ES UN JUGADOR MUY COMPLETO"
"Un gran golpeo de pelota, con desborde, asistencia... Un jugador muy completo, que tiene un crecimiento enorme por delante; todo lo que quiera mejorar y escuchar. Está escuchando, está creciendo, está haciendo goles... Es el camino. No hay otro camino para mejorar lo que está haciendo", abundó el técnico del equipo rojiblanco.
El extremo belga, con contrato hasta 2020 y dispuesto a continuar más años en el club ("ojalá que firme otra vez aquí", apuntó el sábado), disfrutó con uno de sus "días más bonitos" con la camiseta rojiblanca, con la que se afianza este curso en el once titular desde su imparable desborde, pero también desde sus goles: cuatro.
De los diez encuentros oficiales de esta campaña, él ha partido desde la alineación inicial en siete. El pasado curso, a estas alturas, apenas había participado como titular en un único choque, contra el Getafe, del que fue sustituido en el descanso. Después, terminó la campaña con 43 encuentros, 27 de inicio, y cinco goles.
Ahora, en ocho partidos, ha marcado sólo uno menos, cuatro, de los que logró la pasada temporada; la mejor respuesta al desafío que le ha planteado su técnico, ser un jugador más completo y determinante, el mismo que le propuso hace dos años a Griezmann, hoy candidato al Balón de Oro junto a Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.