El Club de Campo queda como líder en solitario de la liga femenina de hockey

El Club de Campo ha vuelto a recuperar la primera posición de la Liga Iberdrola de hockey, después de vencer en el encuentro disputado en su campo y tras el empate cosechado en el partido entre el RC Polo y el Sanse Complutense.

CLUB DE CAMPO, 7 - FC BARCELONA, 0

Contundente triunfo del Club de Campo frente al FC Barcelona. Un resultado que mantiene líder a las locales y a las visitantes lo hace cerrando la tabla.

Un encuentro, donde las de Eduardo Aguilar, ya dominaban al descanso por cuatro goles de diferencia. Superado el mismo, Carmen Cano por dos veces y Lucía Abajo, con el segundo del día en su cuenta particular, acababan por cerrar el marcador.

RC POLO, 1 - SANSE COMPLUTENSE, 1

Intenso encuentro en el Eduardo Dualde entre el RC Polo y el Sanse Complutense. Unas madrileñas que salieron con fuerza, presionando muy alto e impidiendo la generación de juego de las locales. Sin embargo, las de Jordi Alastrue pudieron zafarse del dominio universitario para buscar la portería contraria, forzando así dos ocasiones desde el penalti córner, ejecutadas ambas sin consecuencias.

Un escenario que continuaría por un guion similar hasta llegar el descanso. Fue superado el mismo cuando se desatarían las hostilidades ofensivas. Primero con un lanzamiento de Marta Segú, que Ana Calvo despejaba con acierto. Acción antesala de la espectacular jugada de Lucía Jiménez, que finalizaba en el fondo de la portería catalana.

Una variación que pudo equilibrar Segú, pero otra vez Calvo lo evitaba. Por el lado universitario, antes de llegar al parcial definitivo, Patricia Álvarez se topaba con una brillante Melani García. Fue con un penalti córner, donde la pizarra de Alastrue se puso en funcionamiento, culminando Alicia Umbert con el empate, lo expuesto en la táctica por su entrenador.

Una jugadora, que pudo repetir, pero que chocaba con la manopla de la portera madrileña. La última, también desde el penalti, la tuvieron las universitarias, pero ahora la guardameta canaria impedía otra variación en el luminoso barcelonés.