La Selección española disputará una final de un torneo oficial nueve años después de jugar, y ganar, la de la Eurocopa 2012 a Italia, ante la que se ganó el pase para luchar por el título de la segunda edición de la Liga de Naciones.
El choque disputado en Milán fue una muesca más en intensa relación entre la Roja y la Azzurra a lo largo de la historia y especialmente en los últimos tiempos, en los que se han visto las caras en partidos de gran importancia.
El tercer título continental de la selección española llegó frente a Italia en el Olímpico de Kiev, con una exhibición de fútbol que aún se recuerda y que se rubricó con el triunfo más amplio en una final de la Eurocopa (4-0).
Italia se resarció en los octavos de la Eurocopa 2016 (2-0). Le devolvió la moneda España al apartar a la Azzurra del Mundial de Rusia 2018 -cayó luego en la repesca-. Una ausencia histórica para un equipo que se levantó con tanta fuerza que se convirtió en imbatible y acabó proclamándose campeona de Europa este año tras eliminar a España en la tanda de penaltis de la semifinal.
Y ahora, en esta Liga de Naciones, la moneda ha vuelto ha ser favorable para España, que logró un triunfo histórico en San Siro (1-2) para dejar la racha de su rival en 37 partidos sin perder y meterse en una nueva final.
El título logrado en Kiev bajo el mandato de Vicente del Bosque, que había guiado también a la selección española hasta la gloria futbolística en el Mundial de Sudáfrica, puso punto y final a la etapa dorada de la Roja.
A partir de ahí, las decepcionantes participaciones en los Mundiales de Brasil 2014 y Rusia 2018, así como en la Eurocopa 2016, donde cayó ante Italia en octavos, fueron el reflejo del fin de una generación dorada de la que a día de hoy tan solo queda Sergio Busquets como indiscutible en los esquemas de Luis Enrique Martínez.
La Selección absoluta española a lo largo de su historia ha disputado la final del Mundial de Sudáfrica, con el triunfo ante Países Bajos por 1-0 con el inolvidable gol de Andrés Iniesta en la prórroga; cuatro de Eurocopas, con los títulos en 1964 con el gol de Marcelino ante la URSS (2-1), en 2008 con el de Fernando Torres frente a Alemania (1-0) y el de 2012 con el festival ante Italia (4-0).
Tan solo perdió la final de la Eurocopa 1984 ante Francia en el Parque de los Príncipes de París (2-0). El equipo que dirigía Miguel Muñoz mereció mucho más, pero los detalles le condenaron ante el equipo que comandaba Michel Platini.
También ha disputado España una final en la Copa de las Confederaciones. Fue en 2013 frente a Brasil en el estadio Maracaná de Río de Janeiro y fue el primer gran tropiezo que comenzó a marcar el declive de la Roja.
Los anfitriones, dirigidos por Luiz Felipe Scolari, pasaron por encima de los pupilos de Del Bosque. Fred, por partida doble, y Neymar pusieron un 3-0 inapelable.
La primera selección española, allá por 1920 participó en los Juegos Olímpicos de Amberes, aunque se colgó la plata la derrota ante Bélgica le arrebató la opción del oro y la final que disputó fue por el segundo puesto, que ganó a Países Bajos por 3-1 con un doblete de Félix Sesúmaga y un tanto de Rafael Moreno Pichichi.
Ahora se le presenta a España la ocasión de agrandar su palmarés en el torneo más novedoso del panorama internacional que cumple su segunda edición. En la primera, que ganó en casa la Portugal de Cristiano Ronaldo, estuvo cerca de alcanzar la fase final, pero las derrotas contra Croacia e Inglaterra se lo impidieron tras un comienzo ilusionante.
Y en esta segunda encabezó su grupo por delante de Alemania, a la que vapuleó por un espectacular 6-0, Suiza y Ucrania, ante la que encajó su única derrota, por lo que se ganó el derecho a estar en las semifinales.
El sorteo quiso que España tuviera la ocasión de buscar revancha deportiva ante su verdugo en la semifinal de la reciente Eurocopa, el cuadro italiano, al que superó por 1-2 con un doblete de Ferran Torres.