El Estadio Olímpico de Kiev, en Ucrania, ha albergado partidos de gran categoría como la final de la Eurocopa de 2012 entre España e Italia, pero nunca ha sido sede de un acontecimiento que podría superar los 350 millones de televidentes: la final de la Liga de Campeones 2017-2018.
Fue inaugurado el 12 de agosto de 1923. Obra del ingeniero L.V. Pilvinskiy, se inauguró con el nombre de Estadio Rojo en honor del revolucionario ruso León Trotski, quien inauguró la Primera Olimpiada de la Región de Kiev.
Fue reformado y renombrado en varias ocasiones desde 1923, la más grande de ellas para los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980, en los que Bielorrusia y Ucrania también fueron sedes.
El estadio actual fue reconstruido durante tres años para la Eurocopa de 2012, cuando se disputaron cinco partidos, incluyendo la final que ganó España a Italia.