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El Movistar Estudiantes suma su segunda victoria consecutiva y prosigue su escalada hacia la salvación al tumbar a un espeso Valencia Basket, al que controló en todo momento con una potente mezcla de hambre y veteranía.

El equipo colegial mostró desde el primer minuto una mayor ambición, pero cuando los locales despertaron tuvo también la capacidad de resistir todas las acometidas del conjunto valenciano, que pese a su falta de frescura se ganó a base de constancia un par de opciones de hacerse con el mando del choque pero las desperdició.

ARRANQUE FULGURANTE

Dos triples, uno de Jaime Fernández y otro de Nico Laprovittola, impulsaron el arranque estudiantil, que no sacó todo el partido posible a su ímpetu por un par de imprecisiones pero que se hizo con una prometedora renta, que habría sido mayor de no ser por la solvencia de Jordi Trias.

La movilidad de los dos bases colegiales llevaba al Valencia Basket a multiplicar sus ayudas y los de Sergio Valdeolmillos tuvieron la paciencia de circular el balón hasta dar con el intenso Juancho Hernangómez y el bien colocado Nacho Martín para abrir una pequeña brecha (9-20, m.7).

La salida a la cancha de Antoine Diot dio algo más de brío a los locales, lo que unido a la puntería del certero John Shurna y del todoterreno Romain Sato permitió al Valencia estrechar el marcador. Aún así, entre el escurridizo Darío Brizuela y el trabajo de Nacho Martín y Diamon Simpson pudieron aguantar las embestidas locales hasta el regreso de sus bases titulares (29-30, m.16).

JUEGO DINÁMICO

Con Laprovittola y Jaime Fernández, los colegiales recuperaron parte del dinamismo que habían ido perdiendo con el paso de los minutos, pero la constancia de los locales les concedió el premio de llegar al descanso con el choque de nuevo empatado (37-37, m.20). Tras el parón, de nuevo arrancó con más hambre el Estudiantes, pero esta vez el Valencia Basket ya estaba avisado y, en un principio, evitó con una pegajosa defensa que se volvieran a escapar.

De hecho, llegó a ponerse por delante en el marcador, pero los colegiales se revolvieron y entre Fernández y Javi Salgado se las arreglaron para recuperar el timón y activar a Simpson para poner a su rival contra las cuerdas (42-52, m.28).

Nuevamente Diot fue el encargado de agitar al Valencia y esta vez se asoció con Justin Hamilton para lograrlo. El estadounidense hizo gala de su amplio repertorio ofensivo y entre los dos consiguieron meter en el partido a su equipo antes de arrancar el último cuarto. Pero los de Sergio Valdeolmillos no se derrumbaron y se mantuvieron agarrados a su buena defensa.

NUEVA EMBESTIDA 'NARANJA'

Laprovittola y Nacho Martín pusieron la calma necesaria para que sus compañeros contuvieran esa nueva embestida y el choque entró en un carrusel de fallos por parte de ambos equipos que permitió al Movistar Estudiantes llegar al tramo final con el partido controlado (55-60, m.36).

Pese a su evidente falta de frescura y acierto, el Valencia no dejó de intentarlo y esa constancia le dio una última carta. Volcó su juego sobre Hamilton y un triple de Sato le puso a un solo punto. En la siguiente jugada, un tapón de Luke Sikma sobre Martín le dio la iniciativa y le puso de nuevo el triunfo en bandeja.

Pero ni supo gestionarlo ni el Movistar Estudiantes le dejó. El propio Nacho Martín forzó una pérdida de Sikma y anotó en contragolpe. Neutralizó el último intento de los valencianos, a los que les entró la prisa y que ni si quiera pudo volver a soñar con el triunfo pese al mal porcentaje madrileño de tiros libres.

Valencia Basket (17+20+11+14): Vives (2), Rafa Martínez (7), Lucic (5), Sikma (2), Trias (4) -cinco titular- Stefansson (6), Diot (3), Sato (10), Shurna (11) y Hamilton (12)

Movistar Estudiantes (24+13+17+14): Laprovittola (5), Jaime Fernández (10), Hernangómez (7), Simpson (14), Martín (17) -cinco titular- Pumprla (4), Bircevic (4), Salgado (5) y Brizuela (2)

Árbitros: Martín Bertrán, Castillo y Mas Cagide. Eliminaron por faltas personales a los locales Stefansson (m.40)

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 24 de la fase regular de la Liga Endesa disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 8.000 espectadores