El uruguayo Diego Godín, defensa del Atlético de Madrid, restó transcendencia a la condición de favorito de su equipo en la final de la Liga Europa con el Marsella, porque eso "se demuestra dentro del campo", que ahí es "donde hay que hablar", y esperó que el partido "sea una fiesta en paz".
Godín ya ganó una Liga Europa con el Atlético en 2012. "Han pasado muchos años. Fue el primer título que se consiguió en esta era con el Cholo (Simeone) al frente. Ahora han pasado años, hemos jugado otras finales, hemos ganado muchos títulos y hemos perdido otras finales", repasó el central, segundo capitán de la plantilla.
LA EXPERIENCIA
En ese sentido, el futbolista recalcó la "experiencia" que ha adquirido el equipo desde entonces a ahora, "el haber jugado y saber lo que es jugar una final, lo que se vive en ese momento, en ese partido y lo que significa", añadió el uruguayo, que advirtió, aun así, que "todas las finales son diferentes".
"Estamos motivados por el hecho de estar jugando una final y un título importantísimo para nosotros y para el club. La experiencia que nos da haber jugado finales nos indica que estos partidos son diferentes, que lo que cuenta es ese día y lo que hagas ese día. Es un momento único con muchas cosas en juego, con emociones. Lo psicológico cuenta muchísimo", continuó en rueda de prensa.
"Luego hay cosas que uno no puede controlar. Lo importante, más allá de la condición de favorito, es preparar ese partido con todas las variantes que puedas tener y después hacerlo lo mejor posible en ese momento. La condición de favorito y todo lo demás se demuestra dentro del campo. Ahí es donde hay que hablar", añadió el jugador.