La madre de Luis Rubiales ha tenido que ser trasladada de urgencia al hospital al "sufrir una crisis", según ha anunciado el párroco de la iglesia donde permanecía encerrada.
Se cumplen tres días desde que Ángeles Béjar, la madre de Luis Rubiales, se declaró en huelga de hambre encerrándose en una iglesia de Motril (Granada).
La mujer reclama justicia para su hijo y que Jennifer Hermoso, la futbolista a la que Rubiales besó en la celebración del mundial de fútbol femenino conseguido por España, "diga la verdad" sobre lo ocurrido.
El párroco de la iglesia Divina Pastora, donde Ángeles permanece encerrada, había anunciado que la mujer saldría a declarar ante los medios a las seis de la tarde de este miércoles.
Sin embargo, ha sido el propio sacerdote el que salía a hablar con los medios unos minutos más tarde de lo previsto para informar de que la madre de Rubiales ha sido trasladada de urgencia al hospital por "una crisis".
"Tengo que avisaros de que ha tenido una crisis, ha empeorado; entonces hemos tenido que llevarla de urgencia al hospital, y aquí no está. Se ha tenido que ir al hospital, porque estaba la mujer ya cansada y con problemas no solo a nivel anímico", ha anunciado.
Don Antonio, el párroco, pidió "respeto" para el lugar de culto que es la iglesia, "sitio de oración" y "silencio", que no se puede "romper" como sucedió este pasado martes, cuando miembros de la Policía Nacional tuvieron que acudir a las puertas de la iglesia debido a los momentos de tensión que se vivieron cuando miembros de la prensa y curiosos accedieron al interior del templo junto a los feligreses cuando se iba a oficiar una misa.