Zozulya |
(Actualizado

El partido entre el Rayo Vallecano y el Albacete se suspendió en el descanso por consenso y "sin fisuras" entre el árbitro José Antonio López Toca y la Real Federación Española de Fútbol, debido a que "no se daban las condiciones necesarias" para jugar por los insultos recibidos por Román Zozulyia.

Una parte de la afición del Rayo, la situada en el único fondo del estadio, cantó en reiteradas ocasiones durante la primera mitad 'Roman Zozulya puto nazi'.

Los cánticos provocaron que el árbitro parara el partido en dos ocasiones durante unos segundos en la primera mitad para que se pidiera por megafonía el cese de los insultos. Ante la reiteración de los cánticos ofensivos, la segunda parte no se disputó.

El Rayo condena "tajantemente los insultos" a Zozulya y se considera víctima

Raúl Martín Presa, presidente del Rayo Vallecano, condenó "tajantemente los insultos" que sufrió Román Zozulia, al que une parte de la afición del equipo madrileño le cantó "puto nazi", motivo por el que el árbitro y la Federación decidieron suspender la segunda parte.

"Es una noche triste para el Rayo y para el deporte. Condenamos tajantemente los insultos de una parte de la afición desde el fondo hacia un deportista", dijo Martín Presa, que aseguró que "no se va a tolerar ningún tipo de violencia, ni física ni verbal, en su estadio".

"Estamos en contra del racismo y la xenofobia del deporte. Antes del deporte hay valores y personas", señaló el presidente del Rayo, que mandó un "fuerte abrazo a la mayoría de la afición que estuvo respetuosamente" en el estadio durante el partido.

"Estamos avergonzados de que actúen de esa forma"

"Por culpa de unos pocos la mayoría de personas se tuvieron que volver a casa sin ver un partido. Esto no es política ni lucha de clases. Esto es deporte, es fútbol y está para unir, hermanar y juntar gente de diferentes ideas, razas y religiones", comentó Presa.

"Lo que se ha vivido por parte de una pequeña parte de aficionados no se puede permitir, lo condenamos y estamos avergonzados de que actúen de esa forma. Los cánticos son una vergüenza y una pena", apuntó.Sobre una posible sanción para el Rayo Vallecano, Raúl Martín Presa se mostró tajante al asegurar que no tienen culpa de los comportamientos que pueda tener una parte de su afición.

"El Rayo es una víctima, como el Albacete. Lo que tiene que hacer la policía, que para eso tiene medios y UIP, es identificar a los energúmenos por unos actos que son constitutivos de acoso a una persona. Así se debe operar. El Rayo es una víctima de unos sujetos que lo venían planificando en redes sociales", manifestó.

La Federación decidirá si se reanuda y si se hace en campo neutral o a puerta cerrada

El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) decidirá si el partido Rayo Vallecano-Albacete se da por finalizado o si se reanuda, y de ser así, si se hace en campo neutral o a puerta cerrada.

Así lo determina el artículo 42 (3) de los Estatutos de la RFEF "Del régimen disciplinario" que la faculta para suspender, adelantar o retrasar partidos y determinar la fecha y el lugar de los que, "por causa reglamentaria, razones de fuerza mayor, o disposición de la autoridad competente, no puedan celebrarse el día establecido en el calendario oficial o en las instalaciones deportivas propias".

El mismo artículo indica que corresponden a la RFEF o al órgano en quien delegue "decidir sobre dar un encuentro por concluido, interrumpido o no celebrado, cuando cualquiera circunstancia haya impedido su normal terminación, y, en caso de acordar su continuación o nueva celebración, si lo será o no en terreno neutral y, en cualquiera de los dos casos, a puerta cerrada o con posible acceso de público".

Igualmente señala que debe resolver sobre la continuación o no de un encuentro suspendido por la comisión de hechos antideportivos pudiendo, en este caso declarar ganador al club inocente.

También debe pronunciarse en todos los supuestos de repetición de encuentros o continuación de los mismos, sobre el abono de los gastos que ello determine,declarando a quién corresponde tal responsabilidad pecuniaria.