(Actualizado

El Leganés ha defendido sus credenciales al ascenso directo con una victoria a domicilio (0-1) sobre un Real Oviedo que, incluso, desperdició un penalti y se complica la promoción.

La sensación de desorden fue constante en el Oviedo, que concedía demasiado atrás a la hora de lanzarse a crear, y ese desajuste en el repliegue lo aprovechó el Leganés para asediar la portería defendida por Miño, cosechando las ocasiones más claras de la primera parte a su favor.

GRIEL, UNA PESADILLA

Gabriel, el jugador más desequilibrante del Leganés, fue en quien más apuros puso al meta, primero tras un gran centro de Albizua que el meta le quitó justo antes de rematar y, después, tras un potente disparo desde fuera del área que se estrelló en la cruceta, haciendo buena la estirada del portero.

El Oviedo, sin mucha claridad a la hora de elaborar juego y con mucho toque en su campo, intentó sorprender con un disparo que se fue alto de Toché y buscó el gol con una acción de Bedia y Susaeta en la derecha, que no encontró remate en el área, al adelantarse la defensa a Linares.

Pese a la superioridad manifiesta del Leganés, Serantes tuvo que lucirse en dos ocasiones para evitar que los azules explotaran su pegada arriba. La primera, cortando desde el suelo una contra de Linares, y la segunda, evitando que Toché fusilara por el palo corto, en una acción en la que la defensa pedía fuera de juego.

El Leganés explotó sus bandas y volcó numerosos balones en el área carbayona, pudiendo lograr el tanto que les adelantara en el marcador poco antes del descanso, en un nuevo centro que a punto estuvo de rebañar Gabriel en el área, pero en el que Bautista se adelantó para evitarlo.

MISMO GUIÓN

La segunda parte no cambió demasiado el guión y fue el Leganés quien más peligro siguió creando en el área contraria, lo que le llevó a acabar encontrando el gol en una falta ejecutada por Timor cuyo rechace aprovechó, cómo no, Gabriel, para batir a Miño por la izquierda.

En apenas dos minutos, y a falta de media hora de juego, se adelantó el conjunto pepinero y decretó Arcediano Monescillo penalti a favor del Real Oviedo por una carga de Mantovani sobre Toche, pena máxima que Serantes le detuvo a Susaeta.

El Leganés no materializó sus ocasiones pero se mantuvo serio atrás hasta el final del encuentro, un equilibrio en defensa que sólo puso en peligro un eléctrico Viti, juvenil del conjunto azul, cuando entró en el terreno de juego en lugar de Erice.

El debut del canterano fue la única alegría para la afición oviedista, que mostró su desencanto con el juego del equipo y con su entrenador con una sonora pitada tras una derrota que aleja a los azules del objetivo del playoff a dos jornadas del final.

La afición desplazada desde Leganés no dejó de animar a los suyos en un choque en el que los pepineros salen reforzados para el tramo final de competición y tras el cual recuperan la segunda posición que da acceso directo a Primera.

FICHA TÉCNICA:

Real Oviedo: Miño; Fernández, Josete, David F., Bautista (Míchel, m. 63); Hervías, Erice (Viti, m. 79), Bedia, Susaeta; Linares (Koné, m. 72) y Toché

CD Leganés: Serantes; Bustiza, Albizua, Mantovani, Miramón (Alberto Martín, m. 70), Szimanowski, Insua, Asdrúbal (Rubén Peña, m. 54), Sastre (Víctor Díaz, m. 81), Timor y Gabriel

Gol: 0-1, M.60: Gabriel

Árbitro: Arcediano Monescillo, Dámaso (comité castellano-manchego). Amonestó a Toché (15'), Linares (53') y Bedia (63') por el Real Oviedo, y a Timor (23'), Sastre (40') y Mantovani (65') por el CD Leganés. Expulsó al preparador físico del CD Leganés, Miguel Pérez

Incidencias: Partido disputado en el estadio Carlos Tartiere ante 16.576 espectadores