El Real Madrid continuará la pretemporada desde el domingo en su vuelta a la Ciudad Deportiva de Valdebebas, tras 14 días en Estados Unidos en los que disputó cuatro amistosos que dejaron deberes al técnico italiano Carlo Ancelotti de cara al estreno en LaLiga en San Mamés, como corregir la fragilidad defensiva, paliar la falta de puntería y seguir acoplándose al nuevo sistema.
Dos victorias y dos derrotas. Ese fue el balance del conjunto blanco en tierras estadounidenses en una pretemporada que, incluso a pesar de perder frente al Barcelona (0-3), no deja de ser eso, pretemporada.
Por ello, Ancelotti no está especialmente preocupado por los dos últimos resultados de su equipo. “Ha sido una pretemporada positiva”, aseguró tras caer frente a la Juventus (3-1). Eso sí, sin especial entusiasmo. La nota, “un 6”, calificó.
Rehuyendo cada pregunta acerca del francés Kylian Mbappé, de acuerdo con la política del Real Madrid de no hablar del futbolista y seguir su camino mientras mira en la distancia los acontecimientos, al italiano le toca centrarse en lo que, a día de hoy, puede controlar.
Por ello, en la hoja de ruta de Carletto aparecen marcados en rojo los puntos a mejorar de cara al debut liguero contra el Athletic Club de Bilbao.
Un debe que no es nuevo en el día a día de Ancelotti. La pasada temporada criticó el comportamiento de los suyos a la hora de defender. Y en pretemporada lo ha vuelto a repetir. Haciendo hincapié, de nuevo, en que en muchas ocasiones se trata de un problema de “concentración y actitud”.
Ancelotti sabe de sobra que mantener ese nivel de exigencia durante todos los partidos de una larga temporada como la que aspira tener el Real Madrid es imposible, pero también conoce que la clave del éxito en una Liga que arranca para ellos el 12 de agosto y en la que no pudo competir por el título la pasada temporada se basa en la regularidad y la solidez.
El Real Madrid dejó Estados Unidos tras encajar ocho goles en cuatro partidos. Dos de media por noche. Solo dejó su portería a cero en uno, contra el Manchester United.
Un bajo rendimiento defensivo que no dejó señalado especialmente a ningún futbolista más allá del galo Ferland Mendy, de nuevo lesionado, pero esta temporada tiene recambio natural en Fran García.
Si bien es cierto que Ancelotti repitió el discurso de que los goles encajados residen en un problema de “concentración y actitud”, añadió un componente más: “colocación”.
El 4-4-2 con centro del campo en rombo es en lo que más ha insistido Ancelotti durante la pretemporada. El italiano quiere apostar por este sistema y dejar atrás el 4-3-3 o 4-4-2 clásico que venía usando hasta la fecha.
La salida del francés Karim Benzema; la consideración, de momento, de que Joselu Mato no llega para ser el delantero titular; el no querer pensar en un futuro próximo con Mbappé; y la superpoblación de centrocampistas, especialmente con la incorporación del inglés Jude Bellingham y la vuelta del galo Eduardo Camavinga al medio y no como parche en el lateral izquierdo le han hecho a Carletto apostar y probar dicho sistema.
Una nueva forma de colocarse sobre el campo, mutando, claro según las fases de partido, que hace que aún tenga que trabajar el técnico en esa “colocación” que le priva de un buen rendimiento defensivo. Muestra de ello el segundo gol encajado frente a la Juventus en el que era el croata Luka Modric el que tenía que acudir a las ayudas; y llegó tarde no por falta de ritmo y sí por una mala “colocación”.
En este cambio de sistema, la vida es nuevo para el brasileño Vinícius Junior, quien abandona la banda izquierda de inicio, aunque siempre cae a dicho costado en varias fases del encuentro- para actuar en la doble punta con su compatriota Rodrygo Goes; con Bellingham ejerciendo de 10 e incluso a veces, como probó Ancelotti en algún entrenamiento, de falso 9.
Las ocasiones de peligro están, pero falta el gol. En los dos últimos encuentros, contra Barcelona y Juventus, el Real Madrid disparó en 52 ocasiones, cinco tiros al palo, incluyendo un penalti, incluidos; y solo marcó un gol.
Haciendo una comparación directa, el Real Madrid recibió en cuatro partidos 49 disparos. Y encajó ocho goles. Eso sí, este mal ratio de conversión ocasión/gol no le preocupa a Ancelotti.
"Puede pasar que no tengamos acierto porque estamos con menos frescura para finalizar por el momento de la pretemporada, pero no es un problema. He visto muchas cosas buenas en ataque. A nivel ofensivo no hay problema", aseguró el técnico tras el último partido en Estados Unidos.
Con estos puntos a mejorar arrancará el Real Madrid la parte final de su pretemporada en Valdebebas tras dos días de descanso y después de volver el jueves de 14 días en Estados Unidos en los que el conjunto blanco sacó conclusiones, rehuyó el culebrón Mbappé y reforzó su condición de marca global con miles de aficionados allá donde va.