Vinicius se encara ante la afición de Mestalla | EFE
(Actualizado

Los tres jóvenes de entre 18 y 21 años que fueron detenidos como supuestos autores de los insultos racistas de los que fue objeto el jugador del Real Madrid Vinicius el 21 de mayo en Valencia declararán el próximo lunes ante el Juzgado de Instrucción número 10 de esta ciudad, encargado de la causa.

En el choque que enfrentó al Valencia y al Real Madrid en Mestalla, Vinicius aprovechó un parón del juego para señalar a un seguidor de la grada por haberle hecho gestos comparándolo con un mono.

La Policía Nacional intervino y lo identificó ya en ese momento, y en los días posteriores la revisión de las cámaras de seguridad del Valencia CF permitieron identificar a otros dos aficionados.

Vinicius, líder contra el racismo

El juzgado abrió esta causa tras recibir un atestado por un posible delito de odio elaborado por la Brigada de Información de la Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valenciana.

A estas diligencias previas se acumuló la denuncia por los mismos hechos interpuesta por la Liga Nacional de Fútbol Profesional, entidad a la que se tiene ya por personada en la causa como acusación particular.

Igualmente, la instructora ha acordado comunicar el inicio de la causa al Ministerio Fiscal y librar exhorto a los juzgados de Madrid para que habiliten los medios técnicos necesarios que permitan tomar declaración por videoconferencia a Vinicius Junior, el 27 de junio, en calidad de perjudicado.

Estos insultos llevaron al Comité de Competición a establecer una sanción de cierre de cinco encuentros para la Grada de Animación, que más tarde el Comité de Apelación rebajó a tres.