El Leganés ya se prepara para recibir la visita del Real Madrid, un rival contra el que vivió uno de los partidos más gloriosos de su historia, el triunfo por 1-2 que le dio el pase a las semifinales de la Copa del Rey en el 2018; pero también uno de los más tristes, el empate a dos en Butarque que supuso el descenso a la categoría de plata del fútbol español en el 2020.
Poco más de cuatro años después de aquella jornada para el olvido, el cuadro leganense tratará de sorprender al conjunto de Carlo Ancelotti valiéndose de las señas de identidad que en su retorno a la elite le han permitido, de momento, situarse a cuatro puntos por encima del descenso y sumar en positivo en más duelos de aquellos de los que se ha marchado de vacío.
Algunos datos totales hasta el momento, a falta de la disputa de los partidos aplazados en la liga como consecuencia de las inundaciones derivadas de la DANA de Valencia, ayudan a descifrar sus claves.
Dura competencia bajo los palos
La salida el pasado verano de Diego Conde, guardameta menos goleado de LaLiga Hypermotion en la 2023-24, rumbo al Villarreal, y de su compañero Dani Jiménez, con destino al Huesca, obligó al club a renovar por completo a los inquilinos de su portería.
El primero en llegar fue Juan Soriano, canterano del Sevilla y ex del Tenerife que ya había vestido la elástica blanquiazul en Primera. Y cerca del cierre del mercado se le unió el serbio Marko Dmitrovic, procedente del conjunto donde se formó el otro arquero.
Desde entonces ambos mantienen un bonito duelo por hacerse con la titularidad. Pese a que Soriano firmó un excelente arranque de curso, el lugar en el once inicial es desde hace algunas jornadas para Dmitrovic, quien acumula tres porterías a cero en siete partidos.
Ambos son el tercero y el cuarto con más goles evitados de la competición y hacen que el Leganés sea el segundo equipo con más paradas (45) junto a la UD Las Palmas y el Osasuna y por detrás del Espanyol.
Una defensa rocosa con un líder marcado
Al igual que sucediera cuando ascendió por primera vez con el argentino Martín Mantovani en el 2016, el Leganés vuelve a contar con un capitán con pasado en el fútbol más modesto que ejerce como líder claro del vestuario en la figura de Sergio González.
Más allá de portar el brazalete, González ha demostrado saber adaptarse perfectamente a una categoría en la que debuta y es el octavo jugador con más pases largos del torneo (98), el quinto con más despejes (45), el octavo con más intercepciones (63), el tercero con más recuperaciones (159) y el tercero con más recuperaciones tras pérdida (75); según datos de BeSoccer.
Junto a él aparecen también otros nombres que destacan en métricas individuales como el de Valentin Rosier; quien a pesar de no haber jugado en dos de los tres últimos encuentros ligueros y haber sido suplente en el restante es el sexto con más despejes (43).
Es el tercero con más duelos defensivos (109) y el séptimo con más duelos defensivos ganados (65); el segundo con más 1 contra 1 defensivos (24) y el primero con más 1 contra 1 ganados (15); y el segundo con más entradas (12), solo por detrás de Jude Bellingham e igualado con Marc Casadó.
En lo colectivo el plantel es el segundo con más tiros bloqueados en defensa (49), once de los cuales pertenecen al serbio Matija Nastasic, en el 'top-10' en este apartado.
Miguel de la Fuente: "El Balón de Oro del Leganés es Dani Raba"
Además el Leganés es el líder en recuperaciones (1130), aunque no se encuentra entre los diez mejores de las que se completan en el último tercio, y el segundo en recuperaciones tras pérdida (544).
También el que manda en presiones defensivas individuales (281); el segundo con más despejes en total (257); el tercero con más intercepciones a solo una del Mallorca (534); el cuarto con más entradas junto al Barcelona (50); y el séptimo con más faltas, las mismas que la Real Sociedad (166).
Sin miedo a probar desde lejos
En un apartado que lidera el Barcelona (8), el Leganés aparece en un segundo grupo con cuatro goles desde fuera del área junto al Real Madrid y el Celta de Vigo.
Sin embargo el porcentaje de los tantos que marca de esta manera (30,7%) es superior al de los de celeste (20%) y al de los de blanco (16%). De todos, la mitad de ellos han sido obra del argentino Juan Cruz.
La aportación del banquillo
Las alineaciones titulares del Leganés sorprenden en ocasiones y si bien ya hay jugadores más o menos asentados en el once, es habitual ver alguna sorpresa fruto de la voluntad de Borja Jiménez de repartir minutos (todos los futbolistas han debutado en liga salvo el ecuatoriano Jackson Porozo y el canterano Naim García) y de intentar sorprender en función del desarrollo del partido.
Así, sus cinco goles anotados por hombres salidos desde el banquillo le sitúan en cabeza igualado con Atlético de Madrid, Barcelona, Villarreal y Girona. Asimismo más de la mitad (54%) de los tantos que lleva hasta el momento han llegado a partir del minuto 75.
Otras fortalezas...
El equipo del sur de Madrid es, por otro lado, el octavo con más asistencias acompañado de la UD Las Palmas (12); el que más pases en largo intenta (677) y el quinto que más completa (340); el cuarto con más duelos aéreos (465) y el noveno con más duelos aéreos ganados (186).
Es el sexto con más goles por disparo y con más tiros a puerta que acaban en gol. Además Seydouba Cissé y Dani Raba son de los que más tarjetas provocan (5 y 4) y Miguel de la Fuente el tercero con más presiones defensivas individuales tras Vinicius Jr. y Julián Álvarez.
... y alguna debilidad
Entre los apartados en los que aparece en la parte alta por lo negativo destacan principalmente las pérdidas, pues es el segundo que más acumula en global (1.417) después del Getafe y el tercero que más acumula en campo propio (510).
También está entre los diez que más veces caen en fuera de juego, con el delantero franco-marfileño Sèbastien Haller como el sexto en este capítulo junto al polaco Robert Lewandowski con ocho.
Asimismo es el cuarto con menos pases clave (17), con menos centros con éxito (42) y con menos pases progresivos que sirven para romper líneas (556); el tercero que menos tira (106); y el que menos pasa con éxito al área (79), el que realiza menos pases que acaban en tiro (71) y el que menos toques da en el área (128).