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Sergio Ramos, defensa internacional del Real Madrid, no quiso asumir el papel de favoritos que les concede en las semifinales de Liga de Campeones el técnico del Barcelona Pep Guardiola, al que manó un recado al asegurar que "ya se critica hasta una decisión correcta".

"Nosotros no asumimos para nada el papel de favoritos porque creo que no nos lleva a nada. Si algo nos ha llevado al éxito es la sencillez, la humildad y el trabajo. Y esos son los valores que hay que tener presentes", aseguró Ramos en una entrevista a los medios del club.

A dos días de disputar el tercer clásico, el defensa andaluz pidió un partido "limpio" y "sin teatro". Aprovechó para recordar la queja de Guardiola por el gol anulado a Pedro Rodríguez, por fuera de juego, en la final de Copa del Rey del pasado miércoles en Mestalla.

"Me gustaría que fuese un partido de semifinal de Champions limpio, sano, deportivo, que no haya teatro, que tengamos un árbitro que ni beneficie ni perjudique a nadie. Incluso el otro día se criticaba una decisión correcta que había tenido en la final, que es lo último", dijo en alusión a las palabras de Guardiola.

Asegura Ramos que los jugadores madridistas saldrán "a darlo todo" y dejarse "el alma", y que ve a su equipo "más unido que nunca". "Estamos súper ilusionados con el momento que atravesamos. Es cuando realmente se tiene que ver esa unión verdadera que atraviesa el grupo".

Elogió el nivel mostrado en la goleada liguera en Mestalla (3-6) por los jugadores que menos minutos tienen últimamente. "Demostraron que no sólo son once o doce jugadores importantes, que todos dan la talla dentro del campo".

Destacó el cambio de actitud de la afición del Bernabéu. "A partir de los encuentros del Lyon, Tottenham y Barcelona hubo un cambio y vimos a una afición mucho más volcada, con mucha más ilusión. Son ellos los que realmente tienen que meter ese primer gol y que cualquier equipo que venga al Bernabéu note ese respeto".