Rubén Baraja, que llegó al Rayo Vallecano el 8 de noviembre de 2016, ha sido destituido como entrenador del equipo madrileño, según informó el club. Los resultados, con 13 puntos sumados de 39 posibles, han sido la justificación que ha esgrimido la directiva del Rayo para prescindir de sus servicios y confiar en otro técnico hasta final de temporada con el objetivo de lograr la permanencia.
El balance de Baraja al frente del Rayo se ha resumido en tres victorias, cuatro empates y seis derrotas en trece partidos, que sitúan al equipo, transcurridas 26 jornadas, en la decimosexta posición con 28 puntos, solo uno por encima del descenso. Míchel, el excapitán del Rayo, candidato al banquillo.
"TENGO QUE ASUMIR MI RESPONSABILIDAD"
Tras perder contra el Mirandés, en la última jornada del campeonato liguero, Baraja asumió su parte de responsabilidad por la marcha del equipo, aunque se mostró crítico con otro tipo de situaciones que se han ido dando en el club durante esta temporada.
"Tengo que asumir mi parte de responsabilidad, los resultados nos son buenos, no lo puedo negar, pero creo que trabajo en la línea buena y hay que reflexionar. Igual no todo es un problema del entrenador. Es evidente que cuando el equipo lleva tanto tiempo en la situación que está no todo es cuestión del entrenador y hay otras circunstancias que hay que valorarlas", comentó.
Durante los tres meses y medio que ha durado su etapa en el Rayo, Baraja ha tenido que convivir con temas extradeportivos como la fallida cesión del ucraniano Roman Zozulya o la explosión social de la afición contra la gestión de la directiva con manifestaciones, comunicados y pañoladas en partidos.
En el aspecto deportivo, Baraja ha tomado decisiones que generaron sorpresa, como la de dejar fuera de las últimas tres convocatorias por decisión técnica a pesos pesados del vestuario como el capitán Roberto Trashorras, los defensas Razvan Rat y Zé Castro y el delantero venezolano Miku.
BARAJA: "NOS VAMOS CON LA CONCIENCIA TRANQUILA"
Rubén Baraja, que ayer fue destituido como entrenador del Rayo Vallecano, declaró este martes que tanto su cuerpo técnico como él se van "con la conciencia tranquila del deber cumplido y con una lección más aprendida".
El balance de Baraja al frente del Rayo se ha resumido en tres victorias, cuatro empates y seis derrotas en trece partidos, que sitúan al equipo, transcurridas 26 jornadas, en la decimosexta posición con 28 puntos, solo uno por encima del descenso. El técnico vallisoletano quiso despedirse este martes con un comunicado en el que deseó "lo mejor al Rayo y a la afición", pero en el que no hubo palabras para los futbolistas.
"Es la ley del fútbol y así lo asumo. Han sido tres meses intensos donde mi cuerpo técnico y yo hemos tratado de dar lo mejor de nosotros mismos para ayudar a que este club histórico esté donde se merece. Los resultados no se han dado como queríamos, pero nos vamos con la conciencia tranquila del deber cumplido y con una lección más aprendida", dijo Baraja.
"Sólo puedo decir que nos sentimos en deuda con una afición que nos ha mostrado su apoyo y cariño desde el principio y en los peores momentos. También con aquellos que como nosotros se han dejado todo durante este tiempo para defender los intereses del Rayo", añadió. Por último, Baraja deseó "al Rayo y a su afición lo mejor". "Siempre los llevaré en el corazón. Ha sido un honor. Hasta siempre", concluyó.
GALÁN: "TENEMOS QUE SER AUTOCRÍTICOS"
Ernesto Galán, defensa del Rayo Vallecano, reconoció que la situación deportiva que están viviendo es "jodida", a un solo punto del descenso, y aseguró que tienen que ser "autocríticos y cada uno dar más". "La situación es jodida y sentimos que no damos todo lo que ponemos. Tenemos que ser autocríticos y cada uno dar más", apuntó Galán, que dijo que "solo queda seguir trabajando".
"Hay que creer en lo que hacemos porque así podremos sacar buenos resultados. Hacemos cosas bien, se nos escapan los partidos y estamos en una dinámica en la que estamos abajo. Hay que empezar a reponerse, sacar esto adelante y no vale caer en excusas ni victimismos. Tenemos que ganar", concluyó.