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El Real Madrid ha vuelto a creer en el título de Liga tras la incontestable victoria que consiguió este sábado frente al Almería (4-0), cuatro días después del sonrojo de Dortmund y tres días antes de afrontar la final de Copa del Rey con el Barça, quien se pegó un tiro en el pie en su visita al Granada.

Los de Carlo Ancelotti no tuvieron problemas para tumbar al Almería y cambiar de bando la alegría. Dos horas después del tropezón culé, el Bernabéu se abrazaba con la cómoda victoria frente a los andaluces, la cual llegó sin Cristiano, sin Marcelo, sin Xabi Alonso y sin Sergio Ramos, que prefirió guardarse por precaución para la final.

DI MARÍA, AL LARGUERO

El primer aviso lo dio Di María -escurridizo como siempre- con un disparo al larguero a los tres minutos. El fideo, que pudo haberse perdido el partido por diversas molestias, acabó jugando y fue el mejor de la primera parte. El argentino, versátil como casi siempre, se dejó el alma y abrió la lata con un disparo ajustado al palo largo.

En la segunda mitad, Ancelotti apresuró a los suyos para meter el segundo y cerrar el partido. El objetivo pasaba por pensar en el eterno rival y olvidar cuanto antes al Almería, una vez que la versión de Dortmund ya se había quedado en el vestuario. Bale, poco después de la reanudación, se ayudó de Benzema para establecer el 2-0.

BALE, SENTENCIA

El príncipe de Gales la pegó con fiereza, como acostumbra, pero le debe medio gol a la magia del francés, que estuvo a un alto nivel. Bale, con 14 goles y 12 asistencias, continúa con su imparable trayectoria aunque siga dejando mejores números que sensaciones. A veces parece que si no marca, el británico pierde su esencia.

El segundo tanto aplacó al Almería, sobre todo porque tres minutos después surgió la figura de Isco para imponer el 3-0. El ex del Málaga, que regresó al once, estuvo de sobresaliente en los metros finales. Con la elegancia por bandera, el malagueño ejerció como el mejor socio de Benzema y culminó su gran actuación con un gol de muchos quilates. Dos amagos y un disparo seco al palo corto de Esteban. Imparable.

Ahí murió el duelo y llegó el turno de Casemiro -premiado por su valentía en Alemania- el canterano Llorente y Álvaro Morata, que volvió a ver puerta. El madrileño puso el definitivo 4-0 y calmó las aguas en el coso madridista. La temporada pasa por la Copa, apretar en la Liga, y pensar que el Bayern también es humano. El Dortmund ya lo demostró este sábado (3-0). Chamartín ha vuelto a sonreír. El miércoles, en Mestalla, llega un nuevo termómetro, éste con título de por medio.

FICHA TÉCNICA:

REAL MADRID: Diego López; Nacho, Pepe, Varane, Coentrao (Llorente, min.73; Modric, Illarramendi, Di María (Casemiro, min.63); Isco, Bale (Morata, min.69) y Benzema

ALMERÍA: Esteban; Nelson, Torsiglieri, Hans, Mané; Verza, Corona (Soriano, min.71), Tébar, Barbosa, Zongo (Óscar Díaz, min.68); y Rodri (Aleix Vidal, min.57)

GOLES: 1-0, min.28, Di María. 2-0, min.53, Bale. 3-0, min.56, Isco. 4-0, min.84, Morata

ÁRBITRO: Martínez Munuera (C.valenciano). Sin amonestados

ESTADIO: Santiago Bernabéu