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Marco Reus, Mario Götze y Mats Hummels, tres nombres de una lista de jóvenes jugadores alemanes que forman parte del esqueleto del Borussia de Dortmund y que, en la selección alemana y en su club, componen el tejido apisonador que suele caracterizar a en equipo germano.

El Real Madrid se libró de las semifinales de la Liga de Campeones del Bayern de Múnich, una locomotora que parece arrasar con todo aquello que se le pasa por delante. Pero en el bombo de Nyon le tocó un rival descarado, ambicioso, fuerte y con un buen futuro cimentado en la insultante juventud de alguno de sus futbolistas.

Esos tres jugadores no son los únicos que aportan sobriedad y experiencia desde su edad. Tienen menos peso en la selección alemana, pero en el Dortmund cumplen un papel importante que tendrá que tener en cuenta el cuadro de José Mourinho.

Marcel Schmelzer, Ilkay Gundogan, Julian Schieber, Sven Bender también piden paso y respeto. De momento, están un peldaño por debajo de sus tres compañeros, pero todos juntos, al lado de estrellas como el polaco Robert Lewandowski, forman parte del ambicioso proyecto del técnico Jürgen Klopp, que, el año pasado, dirigió al campeón de la Bundesliga más joven de la historia: 24,2 años fue el promedio del equipo que desbancó al todo poderoso Bayern de Múnich.

REUS, PRODIGIO DE LA ASISTENCIA

Reus, con 23 años, presenta unos números solventes. Entre todas las competiciones suma 17 goles, cuatro de ellos en la Liga de Campeones, donde también se ha prodigado con una asistencia.

Habilidoso, rápido y con buen olfato anotador, también es atrevido. Su equipo pagó 17,1 millones de euros al Moenchengladbach. ¿Preocupado por el precio? Todo lo contrario: "Obviamente han pagado mucho por mí, pero es cierto que siempre he soñado con valer lo mismo que Zinedine Zidane (73 millones) y Ronaldinho (32)", dijo cuando fue cuestionado por su valor.

Y no ha defraudado. Ha cumplido con creces en su primera temporada en el Dortmund.

HUMMELS, JEFE DE LA DEFENSA

Tampoco falla Hummels, de la generación del 88, un año más que su compañero, y eje sobre el que gira la defensa de su equipo. Pretendido por muchos clubes europeos, entre ellos podría estar interesado el Barcelona, tiene todas las cualidades necesarias para ser un central que marque una época con su selección.

Alto -mide 1,92-, elegante, con firmeza aérea y capacidad para sacar el balón jugado, además, de vez en cuando marca goles. Lleva tres este año, uno en cada competición. Y, para desesperación de sus rivales, apenas comete faltas. En la Liga de Campeones ha hecho tres y ha visto una tarjeta amarilla, el mismo número de cartulinas que vio durante toda la Eurocopa de Polonia y Ucrania.

GOTZE QUIERE SER EL RONALDO DE ALEMANIA

Para disgusto madridista, por su cabeza reina una línea argumental parecida con estilo Barça. "La posesión del balón será un factor fundamental contra el Real Madrid", afirmó a la vez que declaró su amor en 'Sport Bild' por el que puede ser su futuro equipo: "El Barcelona es uno de dos o tres clubes que haría que me planteara un posible fichaje", desveló.

El tridente lo cierra Mario Götze, el más joven, 20 años, y con 16 goles esta temporada y cuatro asistencias en la Liga de Campeones. Internacional en todas las categorías, se ha formado en la cantera del Dortmund. El volante derecho del cuadro germano atesora una calidad excepcional y una punta de velocidad desequilibrante que desquicia a sus rivales.

Pero Götze tiene preferencias más madridistas que su compañero Hummels. Comparado en una rueda de prensa con el argentino Lionel Messi, fue contundente: "¿Yo el Messi de Alemania? No, quiero ser el Cristiano Ronaldo de Alemania", aseguró.

Es el mismo que tienen el resto de sus compañeros. Gundogan, 22 años, internacional frenado por la titularidad de Sami Khedira y Bastian Schweinsteiger pero imprescindible para Klopp; Schmelzer, un lateral izquierdo más que solvente; o Julian Schieber y Sven Bender, más descaro pero menos peso.

Entre todos forman un bloque fuerte, potente. Son el presente y el futuro del Dortmund. Apenas hay que moldearles, ya están hechos. La mitad de ellos forman parte del esqueleto de Alemania. El Real Madrid tendrá que tenerlo en cuenta. La juventud germana quiere hacer historia pasando por encima de los blancos.