Rubiales, cinco años de escándalos en la Federación
Accedió al cargo en mayo de 2018 tras la polémica salida de Ángel María Villar, detenido por su implicación en la 'Operación Soule'
La destitución de Lopetegui, el traslado de la Supercopa a Arabia, su sueldo millonario o la guerra con el presidente de La Liga son algunas de las polémicas más sonadas durante su gestión federativa
Redacción
Luis Rubiales se ha negado a dimitir este viernes de su cargo presidencial tras una Asamblea extraordinaria en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
Pese a las ingentes presiones sobre el presidente de la RFEF por el beso a Jenni Hermoso, por ciertos actos obscenos durante la final del Mundial y sus posteriores disculpas en un vídeo polémico, Rubiales se aferra al puesto a pesar de que el CSD tiene previsto emprender acciones para su inhabilitación, al margen de una investigación abierta por parte de la FIFA, el máximo organismo internacional.
Luis Rubiales: "¡No voy a dimitir, no voy a dimitir, no voy a dimitir!"
El 17 de mayo de 2018, Rubiales fue elegido por amplia mayoría como nuevo presidente de la RFEF, ganando en las elecciones a su oponente Juan Luis Larrea por 80 votos a 56. Dejando atrás su etapa como exfutbolista, recordada sobre todo por militar en el Levante UD, el expresidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) cambió ahí la jefatura del sindicato mayoritario por la de la patronal federativa.
Rubiales tenía entonces 40 años y tomó las riendas de la RFEF hasta el 21 de septiembre de 2020, fecha de conclusión para un mandato que ya nacía complicado. Aquello se debía a la inhabilitación definitiva que se le impuso a finales de 2017 al exmandatario Angel María Villar, detenido en julio de ese año por su implicación en la 'Operación Soule'.
El propio Juan Luis Larrea ejerció varios meses como presidente interino, pero perdió los comicios ante un Rubiales que se había granjeado el apoyo de las Federaciones Territoriales más importantes. Desde la cúpula de la AFE, con actitudes ahora criticadas por su excompañera de trabajo Tamara Ramos, Rubiales fraguó el salto a la RFEF y con ello abanderó varias revoluciones a nivel institucional.
Prometió una remodelación profunda del fútbol amateur, aparejada a un cambio de formato en la Copa del Rey; reclamó el mando completo de la RFEF en las competiciones del fútbol sala nacional y, por encima de todo, enfocó el esfuerzo de su gabinete hacia la profesionalización del fútbol femenino para mejorar el impacto económico y deportivo por igual.
Sin embargo, esos pilares de legislatura han acabado por tambalearse debido a un cúmulo reiterado de mala praxis. Por un lado están las medidas legales interpuestas por la RFEF contra Tamara Ramos, después de que ésta acusase a Rubiales de perpetrarle "humillaciones" cuando ambos coincidieron trabajando en la AFE.
Estas afirmaciones de la actual gerente del sindicato Futbolistas ON, descritas como "gravísimas y falsas" por parte de la RFEF, se han unido a testimonios similares a lo largo de esta semana. Beatriz Álvarez, presidenta de la Liga F, ha tildado de "grosera y machista" la actitud de Rubiales hacia ella en algunas reuniones de trabajo.
Beatriz Álvarez, presidenta de La Liga F, sobre Rubiales: “Su ego está por encima de su dignidad”
La destitución de Julen Lopetegui como seleccionador un mes después de tomar las riendas de la Federación, el traslado de la Supercopa a Arabia o la guerra con el presidente de La Liga, Javier Tebas, son algunas de las polémicas más sonadas durante su gestión federativa.
El pasado año Rubiales protagonizó una controversia por la gestión de la Supercopa de España. Unos audios publicados por 'El Confidencial' pusieron en la diana a Luis Rubiales y a Gerard Piqué. Y es que, el exjugador habría recibido una comisión de 24 millones de euros por intermediar para conseguir llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí.
Ambos sostuvieron que la operación fue legal y que fue vital para conseguir el acuerdo con el país árabe. Piqué aseguró que "Lo único ilegal es coger audios privados y filtrarlos por interés". Rubiales, por su parte, insistió en que la FEF no pagó a Kosmos, la empresa de Piqué, sino que lo hicieron los propios sauditas. Un mes después de la filtración, la Fiscalía Anticorrupción inició una investigación.
Rubiales también tuvo que responder ante el Consejo Superior de Deportes (CSD) después de que el Gobierno le exigiese dar explicaciones por haber grabado conversaciones privadas con altos cargos del Ejecutivo de Pedro Sánchez. Entre otros, con el exministro de Cultura y Deporte José Guirao, y con la anterior secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano.
El por entonces presidente del CSD, José Manuel Franco, mostró su preocupación por «la reiterada publicación de informaciones periodísticas que apuntan a presuntos comportamientos irregulares» en una gestión «que puede perjudicar la imagen y el buen nombre» de la FEF. El Confidencial reveló que el máximo dirigente de la FEF grabó en secreto a miembros del Gobierno, y también al presidente del sindicato de futbolistas (AFE), David Aganzo.
En abril de 2022 Rubiales fue señalado por recibir una ayuda para pagar su residencia. Por entonces se criticó que no tendría la FEF no tendría que haber hecho esos pagos. El dirigente aseguró que era «falso» que recibiera 3.100 euros mensuales sin tener derecho a ellos.
El problema estaba en dicha ayuda. La Federación permitía por entonces a su presidente recibir una ayuda económica para vivienda, pero era imprescindible que tuviera fijado su domicilio o residencia fuera de Madrid. Desde aquel altercado se cambió la normativa para especificar mejor los requisitos de esta dotación.
El destino del dinero de la RFEF también fue el epicentro de la polémica cuando el propio tío del presidente, Juan Rubiales, ex jefe de Gabinete del de la Real Federación Española de Fútbol, denunció ante la Fiscalía Anticorrupción el pago de fiestas privadas con dinero federativo.
La Federación desmentía esas acusaciones y explicaba que el exempleado estaba «movido por el despecho, así como por sus alianzas demostradas por aquellos que buscan un deterioro constante de la imagen del presidente».
La presidencia de la Federación le ha reportado a Rubiales unos suculentos ingresos anuales: triplicó su nómina y ya en 2019 quintuplicaba el sueldo de 85.000 euros del presidente del Gobierno. Unos documentos destapados por El Confidencial, muestran que el dirigente pasó de cobrar 12.984,86 euros mensuales en el 2020 a 29.619,46 euros libres de impuestos en el 2021, además de una paga extraordinaria de 237.000 euros en diciembre.
En total, el salario de Luis Rubiales por su trabajo en la Federación durante 2022 fue de de 675.761,87 euros brutos (371.669,03 euros netos).
Un informe de Intervención General de la Administración del Estado desveló también que el máximo responsable del fútbol español cobró una ayuda a la vivienda de unos 3.100 euros mensuales, a pesar de no cumplir los requisitos para ello. Luis Rubiales se había comprado en Madrid un ático de lujo con dos plantas y piscina privada por un precio aproximado de 2 millones de euros.