Stenson conquista el Open Británico y Sergio acaba quinto

El golfista sueco Henrik Stenson se ha impuesto al estadounidense Phil Mickelson en una espectacular última jornada en Royal Troon para conquistar el Abierto Británico, el primer Grand Slam de su carrera, en un toma y daca de categoría que rubricó con una tarjeta récord de 63 golpes.

Desde los primeros hoyos la pelea por la Jarra de Clarete quedó confirmada como cosa de dos. Stenson, que comenzaba con un golpe de renta, y Mickelson dieron continuidad a la exhibición del sábado hasta que el sueco dio el golpe de gracia al torneo en el hoyo 15.

BATALLA CON MICKELSON

Un tremendo birdie de 15 metros puso a Stenson con una renta de dos golpes y tres por jugar. Pese a que no tiró la toalla un Mickelson ganador de cinco majors, el último este The Open en 2013, el sueco entró en el club de los grandes con una última tarjeta histórica de ocho bajo par, menos 20 en el total.

Sergio García terminó como mejor español tras una gran última jornada en el recorrido escocés, dos bajo par que le valieron para terminar empatado en quinta posición. El de Borriol entró por décima vez entre los 10 mejores del Abierto Británico. Miguel Ángel Jiménez entró el Top 20, mientras que Rafael Cabrera Bello y Jon Rahm terminaron 39º y 59º.

La batalla por cerrar el podio fue para el estadounidense J.B. Holmes, tercero en solitario por delante de su compatriota Steve Stricker. Empatados en quinta posición con Sergio García terminaron Tyrrell Hatton y Rory McIlroy, quien se desquitó de una semana complicada con una buena tarjeta de menos cuatro.

La 145 edición del British será recordada por una batalla legendaria en cabeza que coronó a Stenson. Pese a la presión de levantar su primer grande, ante un experto como Mickelson, el sueco desplegó un golf sin límites hasta igualar la mejor tarjeta en la historia de un major (63), igualar la mejor puntuación (menos 20), y establecer un nuevo récord de 264 golpes.

Stenson supo sacar el máximo para dejar sin premio a un Mickelson que brilló igualmente en el Royal Troon. En el hoyo 15 quedó contra las cuerdas y en el 16 se quedó a un pelo del eagle, el mismo que le distanció en la primera ronda de un histórico 62. Pese a luchar hasta el final, el yanqui no evitó su undécima claudicación en la orilla en el Grand Slam ante el rival perfecto.