Teresa Perales hace historia con su 28ª medalla paralímpica

  • Perales: "Esta medalla sabe a récord del mundo"
  • Iguala el récord del exnadador Michael Phelps y se convierte en la tercera deportista con más metales paralímpicos de la historia
La nadadora Teresa Perales celebra su medalla de bronce en los 50 metros espalda S2 Femenino de los Juegos Paralímpicos París 2024
La nadadora Teresa Perales celebra su medalla de bronce en los 50 metros espalda S2 Femenino de los Juegos Paralímpicos París 2024 |EFE

La nadadora Teresa Perales estiró este sábado su leyenda deportiva al colgarse la medalla de plata de los 50 metros espalda S2 en los Juegos Paralímpicos de París 2024 gracias a un extraordinario coraje que le llevó a remontar hasta tocar la pared de la piscina en tercer lugar.

Con ello, Perales acumula 28 medallas paralímpicas (7 oros, 10 platas y 11 bronces) y amplía el reducido grupo de deportistas españoles con más metales en Juegos -concretamente siete, desde Sidney 2000 hasta París 2024-. En ese club también están la exatleta Puri Santamarta y el nadador Miguel Luque.

Además, la nadadora zaragozana escala al tercer puesto histórico de deportistas con más medallas en Juegos Paralímpicos, solo superada por la exnadadora estadounidense Trischa Zorn (46 preseas, entre Arnhem’80 y Atenas 2004) y la nadadora también estadounidense Jessica Long (29, aunque puede ampliar ese número porque compite en París).

Perales alcanza a la ciclista británica Sarah Storey, también presente en París 2024 y que suma 28 medallas paralímpicas. Por detrás están el extirador sueco Jonas Jacobsson, el nadador brasileño Daniel Días y el exatleta, ciclista y esquiador sueco Heinz Frei.

Pocos meses después de los Juegos de Tokio fue operada de su hombro izquierdo -dislocado unos meses antes de esa cita japonesa-, y retomó la competición en marzo del año pasado con una nueva clasificación por su más elevada discapacidad, ya que desde entonces nada solo con su brazo derecho. Así, pasó de la clase S5 a la S2.

SUEÑO CUMPLIDO

Perales aterrizó en suelo parisino con la idea de igualar las 28 medallas del exnadador Michael Phelps, el deportista olímpico más laureado de la historia, y se inscribió en tres pruebas.

El pasado jueves finalizó quinta en los 100 espalda S2, tras rebajar varios segundos su mejor marca personal. Y este sábado participó en los 50 espalda S2, prueba que tenía fijada para recibir su 28ª medalla paralímpica particular.

"Esta medalla sabe a récord del mundo"

La nadadora zaragozana afrontó la final en la piscina de La Défense Arena con el sexto mejor tiempo clasificatorio de las finalistas y, en principio, algo alejada de las posiciones de podio.

Sin embargo, Perales inició la final entre las primeras posiciones, se apartó momentáneamente de las posiciones de podio y, finalmente, acabó tercera tras unos últimos metros finales muy emparejada con la italiana Angela Procida, que a la postre finalizó cuarta, todo ello bajo la mirada de la reina Letizia en las gradas.

Al final, la medalla de oro fue para la singapurense Pin Xiu Yip (1’05”99), la de plata recayó en la mexicana Haidee Viviana Aceves (1’08”96) y la de bronce, para Perales (1’10”95). Procida finalizó cuarta a dos centésimas de la española.

"La más épica"

Una radiante Teresa Perales declaró que la medalla le "sabe a récord del mundo" por todos los problemas que ha pasado en estos últimos años desde Tokio 2020, aseguró que no se va a retirar después de estar en la capital francesa, y dejó "abierta la puerta" a seguir otro ciclo más.

"Esta medalla sabe a récord del mundo. Tiene mucha historia y mucho esfuerzo detrás. Todos los deportistas ponemos mucho esfuerzo y mucho empeño y solo algunos tenemos la suerte de poder subir al podio. Otros tienen la mala suerte de que a veces unas milésimas de segundo te separan de la medalla y es muy injusto", dijo Perales, en la zona mixta de la Defense Arena.

"Esta medalla va un poco por toda esa gente que se queda a las puertas y por todos aquellos que mantenemos la esperanza hasta el final. A mi me daba igual el color, yo quería una, la 28", confesó la aragonesa, obsesionada con igualar en número de medallas al nadador olímpico estadounidense Michael Phelps.

"Ésta es la más épica por encima de todas, por todo lo que ha habido detrás. Ha sido muy difícil reinventarme y volver a aprender muchas cosas de mi vida diaria y de la piscina. Esto es el recordatorio de que somos supervivientes todas las personas y que podemos reinventarnos en cualquier momento", declaró Perales, que agradeció el trabajo incansable de su entrenador, Darío Carreras.

"Yo confiaba pero luego hay que estar ahí. Esta tarde he estado más nerviosa que en toda mi carrera porque antes solo tenía que preocuparme de mi cabeza, de tener controlados los nervios, y ahora tenía que estar también concentrada en que el cuerpo me hiciera caso. Este bronce tiene el color más bonito del mundo y la medalla pesa una barbaridad", señaló.