El italiano Gianluca Brambilla (Etixx) ganó la decimoquinta etapa de la Vuelta a España, entre Sabiñánigo y Formigal, la más corta de esta edición, en la que el colombiano Nairo Quintana (Movistar), segundo, aventajó al británico Chris Froome en 2.39 minutos y dio un paso de gigante hacia el triunfo final. Brambilla cruzó la meta con un tiempo de 2h.54.30. A 2 segundos lo hizo Quintana, Alberto Contador llegó a 33 segundos y Chris Froome, a 2.39.
El ciclista colombiano dio un golpe casi definitivo en la general, en la que ya tiene una ventaja de 3.30 sobre Froome. Alberto Contador fue el protagonista de la etapa en los primeros kilómetros con una serie de ataques que destrozaron al pelotón, sorprendiendo a Froome, Chaves y Yates, que quedaron en un segundo grupo perseguidor.
FROOME, AISLADO
Con Froome aislado, sin equipo, la ventaja fue creciendo, haciendo inútil el esfuerzo del segundo grupo, donde se relevaron al frente el Orica y el Astana. Superados los altos de Petralba (3a) y Cotefablo (2a) la renta alcanzó los 3 minutos.
A pie del último puerto, a 14 kilómetros de la cima de Formigal, el impulso de Luis Leon Sánchez estabilizó en 2 minutos al grupo de 8 que encabezaban Contador y Quintana. Fue Quintana el encargado de llevar el peso del ascenso. Se llevó a rueda a Contador y Brambilla a falta de 4 kilómetros. Cedió Contador y en la recta de meta Brambilla fue más rápido que Quintana.
Este lunes la decimosexta etapa de la Vuelta llevará al pelotón de Alcañiz a Peñíscola a través de 156,4 kilómetros.