Las radios públicas y privadas han visto prohibido el acceso a los estadios en los que se disputaba la jornada de la Liga BBVA y Adelante, al no disponer de las acreditaciones oficiales previo pago del canon que exigen los clubes profesionales.
Tal y como anunció la Asociación Española de Radiodifusión Comercial (AERC), las radios iban a acudir a los campos de fútbol para narrar los partidos que darían comienzo a la Liga Española, pero éstas se han visto ante la imposibilidad de poder acceder a los estadios y de conseguir las acreditaciones necesarias.
En diversos lugares como El Molinón, donde se jugó el Sporting-Real Sociedad, o el Miniestadi, donde se enfrentaron el Barça B y el Villareal B, se ha impedido que los periodistas el acceso a las salas de prensa y a las cabinas de transmisión para narrar en directo los partidos, por lo que éstos lo están haciendo desde los respectivos estudios de radio. Tampoco se permitió el paso a los informadores en los encuentros Deportivo-Recreativo, Hércules-Cartagena, Guadalajara-Las Palmas, Alcorcón-Xerez, Sabadell-Huesca y Alcoyano-Numancia.
El entrenador del Real Madrid, José Mourinho, ha sido uno de los muchos que se ha manifestado en contra de esta prohibición, alegando este mismo sábado que "las radios han sido siempre una parte importante de la pasión que la gente siente por el fútbol y, si no están, el fútbol no será lo mismo".
En un comunicado a principios de agosto, los responsables de las empresas radiofónicas públicas y privadas españolas afirmaron que considerar "cobrar una cuota a las radios por la retransmisión de los partidos de la competición no supondría una mejora en la calidad del servicio para los oyentes". Por ello, defendieron el actual modelo de convivencia entre radios y clubes de fútbol ya que es el "conveniente para ambas partes y el que se viene aplicando desde hace varias décadas".
El Valencia ha hecho firmar un documento a las radios presentes en el estadio de Mestalla, al que ha accedido la cadena COPE, por el cual se comprometía a no informar del partido ni dar alineación alguna ni goles hasta que el mismo terminara, de esta forma podrían entrar en el estadio y utilizar las salas y cabinas de prensa.
Y en el último de los partidos de este sábado, en el que se enfrentaban en el derbi regional el Betis y el Granada, varios periodistas han tenido que comprar la entrada, por valor de 90 euros, para poder acceder al estadio y de esta manera retransmitir en directo el encuentro.
