Isabel Díaz Ayuso, política sin complejos

El pasado 11 de enero Isabel Natividad Díaz Ayuso dio la sorpresa y se convirtió en la candidata del PP a la presidencia de la Comunidad de Madrid. Sorpresa porque, pese a entrar en unas pocas quinielas, parecía que otros nombres fuertes del Partido Popular estaban por delante de las preferencias de Pablo Casado. Finalmente, esta periodista madrileña, de Chamberí y de 40 años (cumplirá 41 el próximo mes de octubre), es la gran apuesta 'popular' en los comicios regionales, con una clara idea de renovar la formación en Madrid con una representante joven, con oficio y con experiencia en comunicación, muy necesaria para explicar a la ciudadanía medidas y proyectos.

No obstante, la vicesecretaria de Comunicación y portavoz del Partido de la Comunidad de Madrid lleva la comunicación en la sangre desde que se licenciara en la Complutense en Ciencias de la Información y se especializase en comunicación política. En el propio PP ya tiene la experiencia de estar en el departamento de prensa de la Consejería madrileña de Justicia e Interior, cuando Alfredo Prada estaba al mando, y de llevar la campaña digital de Cristina Cifuentes en las elecciones de 2015, además de los mencionados cargos como vicesecretaria de comunicación y portavoz madrileña. También ha sido diputada en la Asamblea de Madrid entre 2011 y 2017. Por tanto, conoce bien las idas y venidas políticas en Madrid.

Fiel a Casado

Afiliada al PP desde 2005, es amiga personal de Pablo Casado y siempre ha estado al quite para defender y apoyar al actual líder 'popular'. Su premio ha sido esta candidatura, que ha arrebatado al expresidente madrileño Ángel Garrido, quien, dolorido por la decisión, ha decidido fichar por Ciudadanos y provocar una pequeña crisis en las filas del PP a poco de las elecciones generales del 28-A.

Díaz Ayuso representa un discurso más severo en las filas del PP madrileño, muy alejada de la moderación de Garrido, y se presenta como la "alternativa al socialismo" en estas elecciones madrileñas del 26-M. En su discurso también ha habido hueco para las polémicas, con declaraciones alejadas de lo políticamente correcto sobre el feminismo o Vox. Con descaro y sin complejos, siempre ha expresado en voz alta lo que piensa y representa ese nuevo PP que se quiere alejar de filtros conservadores a la hora de plantear ideas o propuestas. No huye por ello de las polémicas y maneja las redes sociales con solvencia. Impulsiva, también ha necesitado rectificar o matizar declaraciones espontáneas no bien entendidas durante la precampaña. Sirva como ejemplo esos "atascos nocturnos como seña de identidad de Madrid".

Habla de una "remontada histórica" en Madrid tras los malos resultados en las generales y, para ello, ha conformado una lista llena de caras conocidas (con el presidente en funciones Pedro Rollán y varios consejeros de Garrido) así como nuevos rostros que buscan cierta regeneración en las filas 'populares'. "Experiencia y renovación", proclama Díaz Ayuso constantemente. En su seguridad, se muestra muy confiada en ser la próxima presidenta regional. El 26-M es su gran prueba de fuego.

De alquiler en Malasaña

Por último, unos datos personales, que nunca pueden faltar en un perfil. Reside de alquiler en el barrio de Malasaña y vive con su actual pareja en un piso que, reconoce, se le ha quedado pequeño. Díaz Ayuso ya estuvo casada y no es madre, aunque está animada a ello. Entre sus aficiones, el Real Madrid y los toros.

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