'La voz del coraje', el testimonio de 14 mujeres con discapacidad víctimas de violencia machista
Relatan en un libro su calvario y cómo lo dejaron atrás
"Es un camino largo y duro, pero se puede salir"
EFE
Catorce mujeres con discapacidad y víctimas de violencia machista ofrecen en un libro su testimonio de cómo vivieron esa situación que las anulaba hasta que decidieron tomar las riendas de sus vidas y, en muchas ocasiones apoyadas en sus hijos, abandonar al maltratador y empezar una vida nueva y con un empleo.
Así lo han manifestado este jueves en Toledo, durante la presentación del libro "La voz del coraje", que recoge los testimonios de esas 14 mujeres con discapacidad de diferentes partes de España que han sufrido violencia de género, en el marco de un proyecto de Inserta Empleo, la entidad de Fundación ONCE para la formación y el empleo de las personas con discapacidad.
En la presentación del libro han participado dos de esas mujeres, Virginia Cabrera y María Esther Zorita, quienes han agradecido el apoyo recibido por Inserta Empleo y han animado a otras mujeres que estén sufriendo malos tratos a poner fin a esa situación.
María Esther Zorita ha instado a las mujeres víctimas a "dar un golpe en la mesa" y dejar atrás su situación, "es un camino largo y duro, pero se puede salir", para lo cual, ha añadido, es fundamental recibir apoyo y mucha ayuda.
Las dos han asegurado que han sido sus hijos el principal motivo que les ha llevado a denunciar al matratador y empezar una nueva vida.
Virginia Cabrera ha afirmado que su "pilar" han sido sus hijos, "si no llega a ser por ellos, yo hubiera tirado la toalla" por el "cansancio físico y mental" que tenía acumulado.
"Estaba cansada de luchar, cansada de volver a empezar, pero al final ellos son los que dicen ¿cómo vas a tirar la toalla? No puede ser. Tienes que seguir luchando, tienes que seguir adelante", ha indicado Virginia.
Y ha añadido "tienes que seguir y no vale eso de que, como eres víctima, voy a dejar los hijos a la familia. No, tienes que tener coraje, cogerlos del brazo y decir no, yo tiro con ellos porque son mis hijos y voy a salir adelante. Nada de dejarlos con los padres, con los abuelos, con nadie. Tú tienes que empoderarte y sacarlos adelante, porque se puede".
También María Esther ha insistido en que "se puede salir y ser feliz y reírte. Se puede, y sacar a tus hijos adelante. Yo estoy orgullosa de mi hijo, que ha sido mi pilar desde que estaba en mi tripa, que fue el pilar para poder decir basta".
Aunque han defendido esa certeza de que la violencia machista se puede dejar atrás, también han comentado que es un trauma que las acompaña de por vida.
"Yo sigo teniendo pesadillas. Y si lo veo (a su maltratador), me muero", ha dicho María Esther, quien no obstante se muestra positiva: "pero bueno, se puede salir y reír, trabajar y ser feliz".
La organización Inserta Empleo ha atendido a 2.200 mujeres con discapacidad y sus hijos y conseguido para ellas más de 700 contratos laborales, y en Castilla-La Mancha han sido atendidas 180 mujeres y los empleos han ascendido a 40.
La directora de programas y proyectos de Inserta Empleo, Ana Pilar Cruz, se ha referido a la huella psicológica que la violencia machista les deja de por vida, y ha confiado en que este libro de testimonios pueda ayudar a otras personas en la misma situación, generando recursos de empoderamiento destinados a prepararlas para el empleo y de desarrollo personal.
En ese sentido, ha apelado a la necesidad de la colaboración pública privada y de establecer sinergias con el tejido empresarial para dar una oportunidad laboral a estas mujeres que, ha recordado, sufren una doble o incluso triple discriminación: ser mujer, con discapacidad y sufrir violencia de género.
Además, ha continuado Cruz, "la discapacidad en muchos casos ha sido consecuencia precisamente de la violencia que han sufrido estas mujeres" y en el resto de los casos es "la discapacidad la que las hace vulnerables y fáciles de ser víctimas frente al agresor".