Iker Casillas, excapitán de la selección española, fue el encargado de introducir el trofeo de la Copa del Mundo en el césped del estadio de Lusail, donde Argentina y Francia disputaron este domingo la final de Catar 2022.
Casillas fue el encargado de levantar al cielo de Johannesburgo en el Soccer City la copa tras la victoria de la selección española ante la de Países Bajos en el Mundial de Sudáfrica 2010.
Hugo Lloris le tomó el relevo en Rusia 2018 tras el triunfo de Francia sobre Croacia (4-2) en el Luzhniki moscovita, y en Lusail aspira a volver a levantar la copa.