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Javier Quero es un hombre auténtico. A pesar de ello tiene dos caras: una es la que muestra cada noche en Los Tele Tipos. La otra es la que pone orden en la tormenta de ideas que los guionistas generan a diario. Ambas caras se nutren de su creatividad. En un descanso entre sketches, nos ha contado cosas del programa que posiblemente no conocías.

¿Qué hace Javier Quero detrás de las cámaras?

Escribo guiones y coordino los guiones del resto. Coordinar guiones es una labor muy divertida que empieza por colocar los guiones uno detrás de otro. Os haré una demostración: - - - - - - - - - - - - ¿Veis? Aquí tenéis unos cuantos guiones ordenados.

Decenas de sketches cada semana dan para mucho. ¿Cuáles son tus favoritos?

Complicado elegir. Cualquiera de Cifras y letras, sobre todo el de FRSVETSOU, y el de Amar en Tiempo Revuelto. El "Por Ella" de Jose Manuel Soto, dedicado a Susana Díaz, o el "Blanquear sin IVA" cantado por la familia Pujol, entre las parodias musicales. También el Directísimo con Pocholo, que me parece de los más divertidos. En general, los que más me gustan son los más surrealistas: creo que ahí está la esencia del humor. Por ejemplo, los "Pedreroles" con Juan Dato me parecen un claro ejemplo de cómo se puede hacer reír partiendo de lo mas sencillo y llevándolo al extremo más surrealista.

¿Qué es más sencillo para ti, interpretar personajes anónimos o conocidos?

Sin duda los anónimos son más sencillos. A la hora de fabricar el personaje, partes de cero y lo puedes moldear como quieras. Los conocidos te obligan a imitar sus tics para parecerte lo máximo posible y esa labor de observación y parodia es mucho más compleja. Ahí tengo que agradecer la inestimable ayuda de Luis y Fede y también la de Fede y Luis, que con su experiencia me dan claves imprescindibles para conseguirlo.

Háblanos de tu caracterización más elaborada, incómoda o aparatosa.

Cualquier caracterización que conlleve calota tiene una dosis de sufrimiento, pero sin duda con el que peor lo paso es con Chicote. Esa barba es un suplicio que debería estar recogido en la Convención de Ginebra como método de tortura. El picor en la cara es tremendo. Pero he de decir que el equipo de caracterización es estupendo y procura aliviar la incomodidad en la medida de lo posible.

En estos cuatro meses de programa, cuál es la mejor anécdota que puedes reseñar

He cogido cierta fama de destructor. Inmerecida, por supuesto. Y todo por las veces que he tropezado con el croma y lo he roto, que apenas han sido media docena. Ahora, todos me miran cuando algo se rompe en el plató, aunque nunca he roto un plato.

Queremos saber: ¿responderá alguna vez Juan Dato a Pedrerol?

No te lo voy a decir. Te pongas como te pongas.